No se ha concretado la fecha para reponerla en su emplazamiento original por recomendación de la Guardia Civil.
Casi un año después de ser retirada de la cima, la cruz del Aneto volverá a su emplazamiento original en el techo de los Pirineos, a 3.404 metros de altitud. En septiembre del 2023 se bajó en helicóptero a Benasque y una vez restaurada ha estado expuesta desde el 31 de mayo en el palacio de los Condes de la Ribagorza, donde han podido verla cerca de miles de personas.
Mañana, viernes, será el último día para contemplarla de cerca en este lugar de exposición, que será escenario de un acto de ‘despedida’. A las seis de la tarde se bendecirá y luego se bajará al hangar del cuartel de la Guardia Civil, donde será convenientemente embalada para llevarla en helicóptero a la cumbre.
No hay fecha para la operación de traslado, «ni le daremos publicidad», ha comentado el alcalde de Benasque, Manuel Mora. Por consejo del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (Greim), se ha decidido no comunicar previamente la fecha para evitar que puedan subir curiosos a la cima con este motivo. «No queremos que se llene de gente. La Guardia Civil considera que dar publicidad sería peor», ha precisado Mora.
El Ayuntamiento no tiene contabilizadas las visitas que ha recibido en el palacio de los Condes de la Ribagorza, pero ha sido un atractivo turístico para las miles de personas que cada verano visitan Benasque.
La cruz se bajó para reparar los daños sufridos por las adversas condiciones meteorológicas. Suponían un peligro para los montañeros que solían subirse encima de ella para inmortalizar la ascensión con una fotografía.
La restauración fue impulsada por el Ayuntamiento, que contó con ayuda de la Guardia Civil para desplazar por el aire hasta la cima a dos especialistas, el guía local de montaña Chemary Carrera y el herrero Miguel Ángel Plaza, que la reparó en su taller de Villanova, a pocos kilómetros de Benasque.
La cruz fue colocada en 1951. Debido a su envergadura (unos 3 metros de altura) y peso (alrededor de 100 kilos), no ha sido fácil transportarla desde la cima al taller y de aquí al palacio, y volverá a requerir de la ayuda del helicóptero de la Guardia Civil para llevarla de nuevo al Aneto.