Netanyahu advierte a Madrid de que será «irrelevante» en un futuro proceso negociador de paz si da este paso
El Gobierno israelí de Benjamin Netanyahu prepara una respuesta diplomática a España ante el posible paso de un reconocimiento de Palestina como Estado soberano por parte del Ejecutivo de Pedro Sánchez en los próximos días o semanas, según advierten fuentes diplomáticas israelíes a THE OBJECTIVE.
«Reacción va a haber. Eso seguro. Pero no es lo mismo que el reconocimiento (de Palestina) sea mañana que dentro de seis meses, cuando quizás haya un alto el fuego en Gaza y nuestros rehenes hayan sido liberados», avisan las citadas fuentes sin detallar cómo sería la respuesta hebrea si España da el histórico paso ahora o más adelante.
Israel ve una línea roja que España haga un reconocimiento de Palestina como Estado en medio de la guerra de Gaza que se desató tras los ataques terroristas de Hamás del 7 de octubre, por lo que una decisión española en ese sentido provocaría una dura reacción diplomática.
El Gobierno de Netanyahu ya retiró a finales de noviembre a su embajadora en Madrid, Rodica Radian-Gordon, durante más de un mes a raíz de unas «indignantes» declaraciones públicas de Pedro Sánchez, en las que criticó al Estado hebreo por el desarrollo de la guerra contra Hamás. En concreto, el jefe del Ejecutivo indicó que ante la alta cifra de muertos en Gaza tenía «serias dudas» de que Israel estuviera cumpliendo con el derecho internacional humanitario.
Por lo tanto, es posible que el Gobierno israelí vaya más lejos que una nueva retirada de su embajadora, quien precisamente se encuentra en su tramo final de trabajo en Madrid ya que a mediados de julio será sustituida por Zvi Vapni, si Sánchez lleva al Consejo de Ministros el reconocimiento palestino como Estado. De ahí que no haya que descartar una eventual expulsión de la embajadora española, Ana Sálomon, lo que dejaría las relaciones bilaterales al borde de la ruptura. Sálomon ya ha sido convocada por la diplomacia hebrea en varias ocasiones desde el inicio de la contienda con Hamás y el próximo mes de julio cumplirá tres años destinada en Tel Aviv.
Las citadas fuentes israelíes también dan por hecho que habrá consecuencias en las relaciones económicas y de transferencia de tecnología entre ambos países, pero sobre todo que España pasará a ser «un actor irrelevante» en cualquier proceso negociador de paz que Israel pueda iniciar con los palestinos o los vecinos árabes. «España será vetada si reconoce ahora a Palestina», dejan claro.
Este jueves, habrá en la ONU un claro posicionamiento de España a favor de que Palestina sea admitida como Estado de pleno derecho en el ámbito de Naciones Unidas. El propio ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, se desplazará a Nueva York para dar el respaldo español a este anhelo de los palestinos que, con toda probabilidad, será debatido y votado en la Asamblea General si, como se prevé, EEUU veta una resolución en este sentido en el Consejo de Seguridad.
Tras ello, llegaría el momento de que el España dé el paso soberano de reconocer el Estado palestino junto a otros países europeos para que así tenga más fuerza. Sánchez ha visitado varias capitales europeas en las últimas semanas para recabar un consenso lo más amplio posible y tiene el apoyo –más o menos explícito– de Irlanda, Bélgica, Noruega y Malta. Sin embargo, Eslovenia pisó el freno este martes al subrayar que el país balcánico reconocerá el Estado palestino «cuando haya más consenso» y la vecina Portugal se desmarcó claramente el lunes, al hacer hincapié en que no era el mejor momento para ello.
Sánchez dio a entender en la capital eslovena que España ha retrasado el reconocimiento palestino tras el ataque de Irán a Israel, al decir que el Ejecutivo dará el paso «en pocas semanas», presumiblemente cerca de la campaña de las europeas. Albares adelantó hace una semana –antes de que Teherán lanzase los misiles y drones contra objetivos israelíes– que España adoptaría la decisión «en muy breve plazo», por lo que la última gira europea del presidente del Gobierno parecía el preludio de la histórica decisión española. Pero ahora da la sensación, por las últimas palabras de Sánchez en Liubliana, que no será tan inmediato.
Además, España podría reconocer a Palestina con un intercambio de cartas para el establecimiento de relaciones diplomáticas sin acreditar un embajador ante el nuevo Estado palestino en un primer momento. Así, mantendría al cónsul general en Jerusalén, que será Javier Gutiérrez dentro de unas semanas por decisión del propio ministro como representante oficioso ante la Autoridad Nacional Palestina (ANP) hasta que las aguas se calmen con Israel. Fue lo que ocurrió inicialmente con Sudán del Sur en 2011, tal y como ha recordado Albares recientemente.