Libra comisión rogatoria a Caracas para que remitan en sobre cerrado y sin manipulación los teléfonos de Rubén Villalba, el mando de la Guardia Civil que habría cobrado en ‘b’ de la trama y que estuvo presente en el Delcygate
El juez al frente del caso Koldo, Ismael Moreno, acaba de librar una comisión rogatoria a Venezuela para recuperar los teléfonos móviles y otros dispositivos incautados en el registro del domicilio del comandante de la Guardia Civil, Rubén Villalba Carnerero, en Caracas. El magistrado ha ordenado que todo lo requisado por la UCO se traslade a España en un «sobre cerrado» para impedir «cualquier tipo de manipulación» hasta que se incorpore a la causa.
En un auto firmado este mismo martes y al que ha tenido acceso Vozpópuli, el juez requiere el traslado a España de tres teléfonos móviles, dos discos duros externos, y un GPS incautados a este comandante que recientemente fue trasladado como agregado de Interior a la embajada de España en Venezuela. Las escuchas interceptadas a los principales investigados del caso Koldo llevaron a los agentes a poner el foco en este mando de la Guardia Civil que habría cobrado 2.000 euros mensuales de la red a cambio de gestiones al comisionista de la trama, Víctor de Aldama.
La Embajada de España en Caracas se encargará de remitir (los dispositivos) a este juzgado indicándose que tales efectos deberán ser entregados en sobre cerrado de forma que se impida cualquier manipulación hasta su recepciónAuto del juez caso Koldo
Por ese motivo, la UCO detuvo al mando militar el pasado mes de marzo en Barajas, procedente del aeropuerto de Málaga, donde se disponía a coger un vuelo de vuelta a Caracas. Los investigadores se incautaron de dos teléfonos móviles, dos ordenadores portátiles y dinero en efectivo.
En concreto portaba 4.835 dólares repartidos en 43 billetes de 10 dólares; 631 billetes de 5 dólares; 200 billetes de 2 dólares y 850 billetes de 1 dólar. Tras el arresto, el mando militar fue trasladado ante el juez del caso Koldo en su condición de investigado por delito de organización criminal y cohecho. Moreno le dejó en libertad con medidas cautelares.
El caso Koldo y Venezuela
En paralelo a estas diligencias, el 21 de marzo, se libró una comisión rogatoria a Venezuela con el objetivo de registrar su domicilio en Caracas. El 27 de marzo se practicó la diligencia en cuestión, pero las autoridades bolivarianas no autorizaron la participación en la misma de la Policía Judicial al frente de las pesquisas. De esta forma, la UCO no pudo participar en el registro que fue controlado por un fiscal y policías venezolanos.
«Fueron intervenidos dispositivos informáticos en la inspección del puesto de trabajo de Rubén Villalba con la finalidad de localizar documentos, archivos electrónicos, programas informáticos, fotografías, vídeos, agendas, correspondencia electrónica, conversaciones y comunicaciones, y cualquier otro análogo que pudiera tener relación con los hechos investigados«, expuso el informe policial.
Sin embargo, al no ser autorizados por las autoridades de Caracas, los agentes de la UCO comisionados para la práctica de la diligencia tuvieron que dejar el material intervenido allí. Por ello, el juez, a petición de la Fiscalía Anticorrupción, ha cursado la petición formal para recuperar estos dispositivos que pudieran ocultar información de interés para la investigación del caso Koldo. Los tres teléfonos móviles, dos discos duros y el GPS se encuentran en la embajada de España de Caracas, puesto donde fue destinado apenas meses antes del estallido de esta operación.
“Los efectos deberán ser entregados en sobre cerrado o de forma que se impida cualquier manipulación hasta su recepción e incorporación a este procedimiento, así como del acta de entrega y del documento en el que se recoja la práctica de la diligencia solicitada”, indica el auto del magistrado Ismael Moreno. El mismo explica que la comisión rogatoria ahora librada se cursará, como es habitual en estos casos, a través del Ministerio de Justicia.
«Lo de R de todos los meses»
El magistrado Moreno abrió una pieza separada de esta trama para investigar el presunto papel en la misma del comandante Villalba. Los agentes llegaron a él a través de los pinchazos telefónicos a los presuntos cabecillas de la red, entre los que se encuentra el que fuera asesor de José Luis Ábalos y el empresario Víctor de Aldama. Las conversaciones intervenidas desvelarían pagos mensuales al comandante de 2.000 euros a cambio de gestiones en «b».
En concreto, la UCO puso el foco en los mensajes interceptados a De Aldama y a César Moreno, otro de los implicados en el pelotazo de las mascarillas. «Si puedes hacer lo que puse yo del barco que son 1.500 y lo de R para la semana que viene…», reza una de las conversaciones. Al respecto César le preguntó cuánto era y el comisionista le respondió que era «lo de R2 de todos los meses».
Del sumario se desprende también que Villalba recibió pagos de la mujer de Koldo García, también investigada en la causa. Se trata de dos transferencias de 1.000 euros y que se emitieron los días 20 y 23 de diciembre del año 2022, cuando Anticorrupción ya investigaba a la trama por el pelotazo de Soluciones de Gestión con los contratos de las mascarillas. Los abonos se efectuaron desde una de las cuentas bancarias investigadas por la UCO de la Guardia Civil.
El comandante estuvo en el Delcygate
Además, este medio pudo saber que el comandante vinculado al caso Koldo también estuvo en Barajas la noche en la que Ábalos se reunió en secreto con la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez. Se trata pues del tercer imputado en la causa que participó en el famoso Delcygate junto con el exministro de Transportes y el propio Koldo, que entonces era su chófer. Del mismo modo algunos medios han publicado también que Víctor de Aldama estuvo presente esa noche en el aeropuerto, aunque el sumario de la trama no acredita este indicio.
La actuación de Aldama en este episodio que desveló Vozpópuli se habría ceñido a facilitar la entrada de Ábalos y el resto de personas que le acompañaban aquella madrugada de enero de 2020 en la zona de Barajas donde se reunieron con la ‘número dos’ de Nicolás Maduro ya que se necesitaba autorización para acceder a la misma.