Sánchez mantiene su hoja de ruta para reconocer el Estado de Palestina pese al ataque iraní sobre Israel

El presidente remarca que se guía por la «coherencia» y pide a todos los actores «contención y prudencia» | Tras lo ocurrido el fin de semana, se abren dos caminos: uno conduce a la escalada bélica, y por tanto al «abismo», y el otro pasa por exigir un alto el fuego a todas las partes | Portugal aboga también por reconocer Palestina, pero primero de forma multilateral

El Gobierno sigue con su plan para reconocer pronto el Estado de Palestina. De momento no hay fechas, pero la intención es hacerlo pronto y, en la medida de lo posible, hacerlo de manera coordinada con otros países. No frena a Pedro Sánchez el ataque de Irán sobre Israel del pasado fin de semana. Refuerza más, si cabe, a su juicio, la necesidad de llegar a la solución de los dos Estados para procurar la «coexistencia pacífica» de judíos y palestinos.

El presidente del Gobierno, pues, mantiene su posición. Y lo dejó claro en su comparecencia conjunta, en la Moncloa, con el nuevo primer ministro de Portugal, el conservador Luís Montenegro, tras la primera reunión entre ambos. El Ejecutivo luso es partidario también de que se reconozca Palestina, pero que primero se haga de manera multilateral.

Sánchez aseguró que la posición de España se resume en una palabra, «coherencia». «España está apostando por la diplomacia, por la legalidad internacional y por la paz en todo el mundo, en todos los conflictos», sostuvo. El Gobierno, dijo, pide a «todos los actores contención y prudencia», mismo requerimiento que hacía a través de X este domingo, e insistió en que tras lo ocurrido este fin de semana, el ataque con drones y misiles sobre Israel —interceptados al 99%—, se abren dos caminos. «Uno conduce a una escalada bélica que nos puede llevar al abismo, y el otro pasa por exigir un alto el fuego a todas las partes, un proceso de paz» y caminar hacia la «solución de los dos Estados, el reconocimiento mutuo de Palestina e Israel para garantizar la coexistencia pacífica entre ambos». Este último es el camino que «reivindica España», sostuvo.