Dirigido especialmente al público infantil y sus familias, se estrenará los días 22, 23, 28, 29 y 30 de diciembre en el Centro Cívico Universidad de la capital aragonesa
Las entradas ya están a la venta en aragontickets.com, con descuentos especiales a partir de cuatro personas
Zaragoza estrena el musical aragonés ‘Un día sin pantallas’ durante estas fiestas de Navidad, un espectáculo divertido, didáctico y participativo que ofrecerá música, baile y aventuras a los más pequeños de la mano del Capitán Mundo. Este espectáculo, que tendrá lugar en el Centro Cívico Universidad, se representará los días 22, 23, 28, 29 y 30 de diciembre a las 18.00 horas, excepto el día 29 que será a las 12.00 horas.
En palabras de Capitán Mundo, seudónimo artístico del músico Luis Miguel Bajén, es un musical en el que los niños y niñas de Zaragoza van a vivir «mil aventuras, una gran fiesta para cantar, bailar y jugar con amigos». «Jugaremos a ser piratas, superhéroes, astronautas, esquimales, viajar al antiguo Egipto, jugar con monstruos, visitar el circo, saltar, cantar, bailar, divertirse y despertar la imaginación sin necesidad de pantallas«, han indicado desde la organización.
Las entradas ya están a la venta en la página web de Aragón Tickets al precio único de 12 euros, con descuentos especiales para grupos a partir de 4 y 10 personas. Habrá también entradas a la venta en taquilla una hora antes del espectáculo a 15 euros y parte de los beneficios se destinará a la organización SESDown.
Los niños podrán disfrutar del espectáculo protagonizado por Capitán Mundo y jóvenes actores y bailarines procedentes de la Escuela Municipal de Teatro de Zaragoza, como Andrea Baztán, Sara Lapiedra y Adrián Lou.
Además, contará con la colaboración especial de varios coros infantiles, Amici Musicae y de los colegios Juan Pablo Bonet y Andrés Olivan, así como dos de los cabezudos de Zaragoza, El Morico y La Forana.
Con el lema ‘¡Capitán Mundo somos todos!’, el musical quiere estimular la imaginación de los más pequeños, que están invitados a acudir disfrazados y cantar, bailar y participar en las aventuras y las coreografías de las canciones.
Para Bajén, «cantar y bailar es la mejor forma de acercarse a la música; por eso todos los temas musicales están pensados para invitar a que los pequeños los acompañen con sus voces y sus movimientos». «Los coros infantiles que participan en el espectáculo sirven como ejemplo y son el modelo de iniciación musical que queremos apoyar. Hay que reconstruir sus lazos sociales», ha sostenido.
Asimismo, las canciones del musical hablan de emociones y valores como la amistad, la libertad, la valentía, la creatividad, lo bonito que es compartir, jugar al aire libre, bailar, ayudar a los demás, conocer y respetar las diferencias.
