El invento revolucionario contra los incendios 50 veces más efectivo que el agua

César Sallén ha creado Ecofire, un producto orgánico y sostenible que quiere marcar un antes y un después en la lucha frente a la epidemia del fuego

La ropa refrigerante que te protegerá frente a las olas de calor

Todos los años somos testigos de las imágenes de bosques en llamas y gente impotente mirando como el fuego acaba con sus casas y sus granjas. Incendios generados por una negligencia, un accidente o provocados por un pirómano, que arrasan cientos de hectáreas a su paso dejando un panorama desolador que tardará años en recuperarse. Son precisamente estas instantáneas las que llevaron a César Sallén a inventar Ecofire.

Tras quince años de ‘trabajo 24-7 a brazo partido’, fracasando y volviendo a empezar desde cero y sin ningún tipo de subvención, ha creado un producto que supondrá un antes y un después en la lucha contra los incendios forestales.

«Me han apoyado muchísimo los bomberos de la Diputación Provincial de Huesca. Trabajando conjuntamente entendí las necesidades que tenía que cubrir mi idea para ser de diez. Creando un producto que fuera 100% orgánico, biodegradable, comestible, completamente líquido y al fabricarlo o al usarlo no genere ni un gramo de residuos», afirma Sallén. Se marcó el propósito de que todo lo que pusiera en el producto no fuera dañino ni para las personas, ni para el medioambiente.

«Otro desafío es que el producto perdure en el tiempo, porque los bomberos me decían que cambia el viento y vuelve el fuego donde uno creía que ya estaba extinguido. Y este producto, una vez que mojas un árbol o cualquier tipo de maleza que haya en el monte, no se puede quemar», remarca el inventor. El producto se queda adherido y crea una capa carboxílica que anula la conductividad térmica, rompe la reacción en cadena que produce la temperatura de la llama en los combustibles forestales. Y al quedarse pegada, evita también el contacto con el oxígeno.

César Sallén probando Ecofire SIMONRACK

Por lo que Sallén apunta que se rompen «dos partes del triángulo del fuego. Uno es el combustible, que en este caso son los árboles, en el otro lado es el oxígeno:si no hay, no puede arder. Y baja la temperatura porque el fuego ya no encuentra nada que pueda quemar o reaccionar con él. Ni echándole gasolina podemos quemar un pino al que hemos rociado con Ecofire».

Y cuando llueve más de 10 o 15 litros por metro cuadrado, entonces el producto se disuelve y se integra en el suelo sin generar restos. «Y ahora nos hemos dado cuenta que apagamos también las baterías eléctricas de los coches. Hace años se produjo un incendio terrible en Guadalajara en un cementerio de neumáticos generando un humo tóxico o el que se produce en polígonos industriales o por quemar plástico, sin embargo con este producto en cuanto cae encima del material en llamas, automáticamente absorbe toda la energía y se apaga instantáneamente», apunta Sallén.

César Sallén demostrando la efectividad de Ecofire SIMONRACK

Y los bomberos le han comentado que Ecofire es cincuenta veces más efectivo que el agua. «Para hacer una línea cortafuegos con este producto, yo simplemente necesito fumigar lo que es la vegetación. Si eso lo hago con agua, echo 500 litros, y a los diez minutos no me sirve de nada. porque cuando llega el incendio alcanza 700 grados y el agua que hemos echado se evapora. Lo que a su vez se traduce en más aporte de oxígeno», detalla el inventor.

Este producto, en cambio, se mantiene latente. O sea, lo hecho hoy sobre los árboles, y si durante seis meses no ha llovido, esa vegetación, no la podremos quemar. «Y al ser 50 veces más efectivo que el agua, quiere decir que con un camión de bomberos con Ecofire, haríamos el trabajo de 50 camiones de bomberos. Todos los bomberos, los forestales, los que lo han visto están todos alucinando. Y de hecho, estamos vendiendo muchísimo producto fuera de España, lo puedes comprar en cualquier ferretería y lo comercializa Simonrack».

Proyecto de futuro

Es una tecnología que salva vidas. A futuro quiere sacar una ropa que lleve componentes de este producto. Guantes, botas, que los bomberos puedan ponerse y puedan atravesar las llamas sin quemarse. Menciona que también recibe muchas peticiones de investigación, sobre todo para todo el tema de la madera y porque cada vez se quiere construir con menos agua, con menos cemento, bueno, de forma más sostenible. Con sus hermanos ya ha desarrollado antes otros proyectos como vallados inteligentes o robots para la desactivación de explosivos.

«En fin he dejado media vida para sacar esto adelante. No digo que no vayan a volver a darse incendios, pero si se pueden quedar en dos hectáreas, y no llegamos a estas anormalidades que cada año van a peor, pues la verdad es que estaría más que satisfecho por el trabajo realizado».