Casi dos meses después de la fecha inicial prevista y con dos posibles aperturas frustradas por el camino, el hotel de lujo Royal Hideaway Canfranc abrirá este viernes sus puertas. Se trata del primer hotel de cinco estrellas en la provincia altoaragonesa, impulsado por el Grupo Barceló bajo la propiedad del Gobierno de Aragón.
Lo que hace décadas fue una estación de ferrocarril clave que servía de puente entre España y Francia, pasa a ser un complejo hotelero que busca atraer el turismo de alto standing que trascienda a la mera temporalidad de los meses de nieve.
El hotel tendrá 104 habitaciones, de las cuales 4 serán suites de lujo, mientras que el histórico vestíbulo de la estación se convertirá en la recepción. Además, dispondrá de una zona de wellness con una piscina climatizada y una biblioteca. Junto a ello, se han rehabilitado dos vagones siguiendo el estilo clásico del siglo XX para alojar el restaurante principal.
Varios retrasos
La idea inicial del Grupo Barceló era abrir el hotel el pasado 5 de diciembre, aprovechando el inicio de la temporada de nieve de las estaciones de esquí en Astún y Candanchú y el puente de la Constitución. Sin embargo, esos planes pronto se fueron al traste por un problema de suministros. Y es que en esas fechas, el complejo carecía de luz al faltar por entregar a Endesa la construcción de 3 centros de transformación.
Ello impidió también incumplir la palabra de empresa y DGA, que vaticinaban que estaría abierto «a lo largo del mes de diciembre».
La segunda fecha que se postuló fue la del 24 de enero, pero en este caso los deseos se toparon con la meteorología. La copiosa nevada caída la semana pasada impidió que el hotel estuviese finalizado «al 100 %», según trasladaron desde el servicio de atención al cliente de Grupo Barceló a este diario. En ese momento, expresaban su deseo de finalmente inaugurar el negocio este viernes, un plazo que sí se ha cumplido.
«Potenciar la historia»
El proyecto de recuperación de la estación recibió la semana pasada en Madrid el premio Re Think Hotel como uno de los mejores proyectos de sostenibilidad y rehabilitación hotelera realizados en España por el trabajo de conservación del patrimonio cultural de un edificio emblemático con más de 90 años de historia, según destaca el grupo en una nota de prensa.
«El hotel se ubica en un edificio único en su género, por lo que el proyecto de rehabilitación ha tratado de potenciar la gran historia de esta estación de principio del siglo XX a la vez que diseñábamos un hotel de 5 estrellas gran lujo con los estándares de la marca Royal Hideaway”, expresa Juan Manuel Gordillo, subdirector general de construcciones y desarrollo de Barceló Hotel Group.
A la vez, el grupo observa la oferta culinaria como otra de las patas que sostienen el proyecto. Fruto de ello es la apuesta por dos expertos en alta cocina, Eduardo Salanova y Ana Acín, en la dirección gastronómica. Ambos han estado al frente de La Venta del Sotón y Espacio N, un restaurante dentro La Venta que en 2021 se alzó con una estrella Michelin en reconocimiento a su cocina aragonesa de vanguardia.
«En un lugar que ha significado tanto para la historia de nuestra región, la cocina tiene mucho que contar y aportar. Queremos ensalzar la gastronomía de nuestra tierra a través de recetas y propuestas innovadoras en las que la calidad está por encima de todo”, apunta Salanova.
