El COE negoció en secreto con Artur Mas una candidatura conjunta. Tras una reunión se dijo: «Ni puto caso a Zaragoza»

Un informe de la Guardia Civil, que forma parte del sumario del caso Voloh sobre el desvío masivo de fondos públicos al movimiento independentista, ha revelado que el presidente del Comité Olímpico EspañolAlejandro Blanconegoció en secreto en noviembre de 2019 la candidatura conjunta de Cataluña y Aragón para los Juegos Olímpicos de Invierno 2030 con el expresidente de la Generalitat Artur Mas y un alto cargo de los gobiernos de Quim Torra y Pere Aragonès imputado en varios casos de corrupción.

Según publica este viernes ‘El Confidencial’, Blanco les habría pedido 400.000 euros que presuntamente servirían para hacer contrataciones opacas, y el Govern habría usado ese proyecto de candidatura para desviar dinero de forma irregular al colectivo independentista y usarla con fines políticos.

Siempre según el citado diario, el 7 de noviembre de 2019 Blanco se citó en un restaurante con el presidente de la Diputación de Gerona y alcalde de Bañoles, Miquel Noguer, y el entonces secretario general de Deportes de la Generalitat y actual secretario de Acción Exterior, Gerard Figueras, detenido poco después los presuntos delitos de malversación de caudales públicos, tráfico de influencias y prevaricación.

En esa reunión, registrada por la Guardia Civil por orden judicial, Blanco habría asegurado que tenía el aval del presidente del GobiernoPedro Sánchez, y de Zarzuela para la candidatura conjunta de Cataluña y Aragón. Explicó que el «Gobierno central» cubriría la mayor parte de los gastos y que el dinero se canalizaría a través del propio COE.

Para poner en marcha la candidatura, Blanco reclamó presuntamente un pago inmediato de 400.000 euros, que saldría de una empresa pública controlada por el Govern, Ferrocarriles de la Generalitat.

Aunque supuestamente era una candidatura conjunta con Aragón, el informe de la Guardia Civil sobre esas grabaciones no recoge ninguna mención de Blanco ni de los otros comensales a la necesidad de hablar con el Gobierno de Javier Lambán para que el proyecto avanzara de forma coordinada.

El secretario general de Deportes, eso sí, habría hecho varias llamadas telefónicas después del almuerzo que también fueron intervenidas por la Guardia Civil. En una de ellas habría contado a Noguer que Blanco había propuesto realizar un acto en Zaragoza con la sociedad civil aragonesa, pero este habría respondido que no había que hacerles «ni puto caso», evidenciando de este modo la falta de interés de la Generalitat en cooperar con el Gobierno de Aragón para garantizar que los potenciales beneficios de los JJOO se repartieran de forma equitativa.

La candidatura conjunta de Cataluña y Aragón fue presentada oficialmente en julio de 2021, pero el Gobierno de Lambán sostuvo desde el principio que el COE y el Ejecutivo de Pedro Sánchez estaban favoreciendo a la Generalitat en el reparto de las pruebas deportivas, en el propio nombre elegido para la cita (Barcelona-Pirineos) y en otras cuestiones de carácter técnico.

Lambán se negó en repetidas ocasiones a aceptar las condiciones del COE y Cataluña y, finalmente, Blanco anunció el pasado martes que había decidido retirar la candidatura de España a los JJOO 2030 por los problemas para alcanzar un acuerdo.

Curiosamente, el presidente del COE ha llegado a acusar a Lambán esta semana en una radio catalana de haber llevado el proyecto «al terreno político». Por su parte, la consejera de Presidencia de la Generalitat, Laura Vilagrà, manifestó que Aragón no ha querido «hacer equipo con Cataluña por ser catalanes».

Lambán se ha defendido de estas críticas asegurando que lo único que ha hecho ha sido defender los intereses de Aragón, recordando que «buscó un acuerdo hasta el último momento».