El Gobierno se compromete a la convocatoria de un Debate del Estado de la Nación en el próximo periodo de sesiones. Es decir, en el primer semestre de 2022.
La portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, ha confirmado este lunes que esa es la intención del Gobierno como un hito más en la normalización de la legislatura. «En esa recuperación de la normalidad tenemos Presupuestos Generales del Estado, tendremos una legislatura de cuatro años y, en el próximo periodo de sesiones, tendremos un Debate del Nación», ha trasladado durante una entrevista en televisión.
El Gobierno hace este anuncio cuando precisamente esta semana el presidente del Gobierno se enfrentaba en el Congreso de los Diputados a esta pregunta por parte de Pablo Casado en la sesión de control.
El debate sobre el estado de la nación se celebró por última vez en febrero de 2015, con Mariano Rajoy como presidente del Gobierno y Pedro Sánchez como jefe de la oposición. Se trata de un formato que no está incluido en el Reglamento del Congreso, pero se ha convertido en costumbre parlamentaria con el paso del tiempo, desde que Felipe González lo convocó por primera vez en 1983. El debate no se celebraba solo los años en los que habían tenido lugar unas elecciones generales recientemente.
En el Gobierno han venido defendiendo en primer lugar que está cita viene posponiéndose ya desde el último mandato de Rajoy. Y defienden además que los años previos ya con Pedro Sánchez en La Moncloa han estado marcados por acontecimientos que justificaban su no celebración. Esto puede ser válido para 2018, 2019 y 2020. Moción de censura, doble convocatoria electoral y pandemia. Por este orden han sido los elementos que han servido para justificar la no convocatoria de tan importante debate. El año pasado, además, hubo otra moción de censura, la presentada por Vox.
Pero 2021 ha sido ya un año en el que el parlamento ha empezado a operar con más normalidad y el Gobierno ha evitado convocar este debate. Ahora se lanza el compromiso para evitar que esta cuestión se convierta en un elemento de desgaste más y para trasladar que junto a la aprobación de dos Presupuestos consecutivos la política española recupera las costumbres habituales perdidas desde 2015.
