El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha asegurado durante la entrevista en directo realizada en abc.es por el director Julián Quirós, que si el Gobierno cree que Vox es una organización terrorista «y lo tienen tan claro, que me detengan».
Abascal ha asegurado que desconoce el origen de las cartas amenazantes enviadas a miembros del Gobierno, pero sí ha dudado de lo que dice el Ejecutivo, afirmando que más parece «un montaje de la izquierda ante las encuestas que pronostican una derrota histórica «.
El líder de Vox ha advertido que mantendrá su lucha por las ideas, por los temas que son banderas de Vox, afirmando que «van a tener que echarnos encima a muchos jueces corruptos y fiscales para amordazarnos».
Abascal ha criticado la condescendencia que, a su juicio, se ha tenido con los partidos nacionalistas, subrayando que «el timón del futuro de España se ha entregado a las fuerzas minoritarias».
«Cordón sanitario»
El líder de Vox ha rechazado la idea de que la violencia y la tensión beneficie a Vox, subrayando que «a Vox no le conviene la tensión, nos perjudica y beneficia a la izquierda, por eso la perpetra».
Sobre su relación con el PP, Abascal señaló que son proyectos políticos distintos, pero es consciente de que «estamos más cerca del PP» y que Ayuso «no ha caído en el cordón sanitario contra Vox». En este sentido, confirmó que «si gana el PP y quiere nuestro apoyo, lo va a tener».
Abascal ha rechazado ponerse etiquetas ideológicas y definiciones para Vox, pero ha afirmado con contundencia que «prefiero que el señor Iglesias me llame fascista, a que me aplauda».
