El independentismo fracasa en su intento de controlar la patronal de las pymes catalanas

El independentismo ha fracasado en su intento de asalto a Pymec, la patronal de las pequeñas y medianas empresas de Cataluña. La Assemblea Nacional Catalana (ANC) intentó emular en esta patronal el éxito conseguido al hacerse con el control de la Cámara de Comercio de Barcelona, un paso más en su plan de penetración social en asociaciones y colegios profesionales.

La candidatura oficialista de Antonio Cañete se ha hecho con la victoria con 3.097, mientras que Pere Barrios, al frente de Eines de País, candidatura auspiciada por la ANC, ha obtenido 599. Ha habido 21 votos en blanco, con un índice de participación del 45,96%, un nivel que disipa las acusaciones de fraude alentadas por la candidatura independentista. A diferencia de la Cámara de Comercio, donde cualquier empresario o autónomo podía votar, en Pymec solo los socios al corriente de pago han tenido derecho al sufragio. La candidatura continuista se ha impuesto con rotundidad.

Con su intento de asalto, la ANC trataba de emular en Pymec su jugada ganadora en la Cámara de Comercio de Barcelona, que consiguieron poner bajo control del independentismo movilizando a autónomos y pequeños empresarios frente a una gran empresa que tradicionalmente había controlado el ente. De hecho, Abertis, Naturgy y Catalonia Hotels, tres de las grandes firmas que se integraban en la Cámara, confirmaron la pasada semana que dejaban su silla en el pleno, algo que las firmas desvincularon del giro político en la institución pero que inevitablemente se relacionó.

Además de la presidencia de Pymec, en juego estaba el equilibrio y reparto de fuerzas entre las dos principales patronales catalanes: la citada Pymec, y la histórica Fomento del Trabajo, representante tradicional de la gran empresa. De hecho, la candidatura de Pere Barrios se presentaba con el propósito declarado de impugnar el acuerdo de representatividad alcanzado entre Pymec y Fomento con la Generalitat tras años de divergencias, y convertir a la asociación de la pequeña y mediana empresa como única patronal catalana.

A lo largo del día, y ante la constatación de que la victoria independentista era una quimera, el propio candidato secesionista Pere Barrios ya asumió su derrota dando por hecho de que iban a perder por mucho. Del mismo modo, desde su candidatura, y él mismo, han denunciado dificultades y colas para votar, lo que han atribuido a un intento de fraude. Pese a ello, no han impugnado los resultados.

A lo largo del ‘procés’, la oposición de Fomento a los planes rupturistas ha sido relativamente firme, algo que no se puede decir de Pymec, patronal tradicionalmente aliada de CiU y que llegó a integrarse en el llamado Pacto Nacional por el Derecho a Decidir. Solo en la fase final del ‘procés’ Pymec, presidida por el histórico Josep González, se desmarcó de las posturas unilateralistas. La línea de neutralidad política es la que propugna el ya nuevo presidente Antonio Cañete.