El Covid-19 y los efectos de la pandemia siguen coronando la lista de preocupaciones de los españoles. Según los datos del Estudio especial sobre consecuencias y efectos del coronavirus (II) en la población española, publicados este viernes por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), la crisis ha provocado que la población esté más ansiosa (62,3%), irritable (47,8%), agobiada (64,1%) pero, sobre todo, intranquila (73,8%). Esto se debe a que, para el 44,4%, su familia directa se está viendo «bastante» afectada por la crisis provocada por el nuevo virus, sobre todo en sus relaciones y formas de vivir.
Respecto a las noticias que se van conociendo sobre el desarrollo de las vacunas contra el coronavirus, el 32,5% de los españoles estaría dispuesto a vacunarse inmediatamente. En cambio, la mayoría (55,2%) preferiría esperar a conocer los efectos de la misma sobre los individuos. Solo el 8,4% de los españoles se negaría a recibir algún tipo de vacuna. Si la inyección se la recomendara su médico por su historial clínico o por el riesgo de contagiar a algún familiar cercano, en cambio, estos preferirían vacunarse inmediatamente (59,6%), frente al 26,2%, que no se vacunaría en ningún caso.
En cuanto a la necesidad de que se cumplan las normas de protección contra el coronavirus, solo el 16% cree que es suficiente confiar en que las personas las cumplan voluntariamente. La inmensa mayoría (78,4%), en cambio, opina que son necesarias medidas impositivas como sanciones o multas. De este último grupo, 1 de cada 2 (49,2%) cree que hay que endurecerlas, frente al 42,2% que opina que no es necesario que sean más estrictas. La mayoría (62,4%) culpa a los jóvenes como el grupo más indisciplinado con las normas de protección del coronavirus.
La percepción de los españoles es que, tras la desescalada inicial (que culminó el pasado mes de junio), hay muchas personas que empezaron a saltarse las normas, tal y como apuntan el 80,3% de los encuestados. El 38,2% está de acuerdo, además, con la última declaración del estado de alarma, que lo instauraba para los próximos 6 meses.
