Los impuestos vertebran el «pacto a la madrileña» de PP, Cs y Vox

Madrid tiene los impuestos más bajos de toda España y el propósito es que el «pacto a la madrileña» PP, Cs y Vox en el gobierno de la Comunidad de Madrid, que se da prácticamente por hecho, materialice una verdadera revolución fiscal durante la nueva legislatura. Y es que, al margen del reparto de puestos, uno de los asuntos medulares que vertebrarán la negociación a tres bandas del bloque de la derecha serán los impuestos.

Precisamente, la fiscalidad ha sido el punto fuerte del programa electoral de la candidata del PP, Isabel Díaz Ayuso, que se presentó a las elecciones anunciando una verdadera transformación fiscal.

Los populares pondrán sobre la mesa sus ambiciosas promesas electorales en materia impositiva que pasan por rebajar la tarifa del IRPF en 2,5 puntos (0,5 puntos por cada tramo) hasta reducir en 300 millones anuales la cuantía a pagar por los madrileños. Además, propone 11 deducciones sobre el IRPF que afectan a la familia, los mayores, el acceso a la vivienda, los emprendedores y los estudios. Y es que los populares mantienen la filosofía de que, bajando los impuestos, se incentiva la actividad económica y el empleo.

La formación naranja, que lidera Ignacio Aguado, subordina su bajada fiscal a lo que haga el gobierno socialista de Pedro Sánchez. Quiere compensar cualquier subida impositiva que haga el Ejecutivo socialista de tal manera que, por cada euro que suba, se rebaje en el tramo autonómico.

La candidata de Vox, Rocío Monasterio, también está de acuerdo en bajar los impuestos en la Comunidad de Madrid, aunque su programa es más reducido en el ámbito fiscal. Pondrá sobre la mesa su propuesta de reducir el tramo autonómico del IRPF dentro de los límites legales o aumentar las deducciones por hijo a cargo y gastos de asistencia en el hogar a mayores, dependientes y personas con discapacidad. También quiere que se incremente la bonificación del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, un impuesto que podría tener los días contados teniendo en cuenta que Ciudadanos es partidario de su supresión y, al igual que ha ocurrido en Andalucía, las tres formaciones del centro derecha podrían alcanzar un acuerdo.

Madrid, no obstante, es pionera en la bonificación del impuesto de sucesiones. Este camino se inició hace dos años con el Gobierno del PP y recientemente se amplió en un 15 por ciento a los hermanos y en un 10 por ciento a los primos con el apoyo de la formación naranja.

Ahora está por ver el reparto de puestos en la composición del gobierno de centro-derecha. De momento, al ex presidente de la Comunidad de Madrid y número trece en la lista de Ciudadanos, Ángel Garrido, no parece disgustarle la idea de convertirse en presidente de la mesa de la Asamblea de Vallecas. Ayer manifestó que será su grupo político el que decida «lo que crea conveniente» en el supuesto de que fuera el elegido para presidir el parlamento autonómico. Lo que ya está claro es que el PP no va a vetar su nombramiento si finalmente lo propone Cs. Mientras, el PSOE quiere hacer valer su mayoría y prosigue su ronda de entrevistas con los grupos políticos. Díaz Ayuso mantuvo ayer su «encuentro de cortesía» con Gabilondo.