El balance de Pablo Casado del año que está a punto de acabar ha sido netamente negativo: ha sido un año «horribilis», ha subrayado, con el peor Gobierno de la historia de la democracia. El presidente del Partido Popular ha acusado a Pedro Sánchez de actuar este año tan difícil con «mentiras, incompetencia y arrogancia».
«Ha sido muy mal año por la pandemia, con un pésimo Gobierno, y con una oposición que sigue manteniendo la mano tendida en los pactos que puedan mejorar el día a día de los españoles», ha subrayado el jefe de la oposición.
El líder del PP ha aprovechado para responder a Sánchez, que estaba haciendo su peculiar balance, basado en los «expertos», y en el que ha presumido de cumplir un cuarto de su programa. Casado ha recordado primero que quien controla al Gobierno no son los «expertos», sino los representantes de los españoles en el Parlamento.
«Las declaraciones de Sánchez sobre el cumplimiento de sus compromisos tiene la misma credibilidad que cuando habló del comité de expertos durante la pandemia. La credibilidad de Sánchez es nula. El cumplimiento de la acción de un Gobierno lo tiene que evaluar el Parlamento. Sánchez no es el presidente de una República, sino el jefe del Gobierno de una monarquía parlamentaria, y por tanto no puede abstraerse del control parlamentario y judicial».
Casado ha tendido la mano al Gobierno para aprobar cualquier medida que sirva para reforzar a la Monarquía, después de los ataques a los que ha sido sometida por Unidas Podemos y algunos de los socios de Sánchez.
«Todo lo que sea reforzar a la Monarquía, bienvenido sea», ha señalado Casado, quien cree que es el Gobierno el que debe ponerse en contacto con el principal partido de la oposición. Eso sí, se ha mostrado en contra de tocar la Constitución. «No es el momento, no hay interlocutores ni mayoría que lo aconseje». En concreto, ha señalado que una ley de Corona, para reforzarla, estaría dispuesto a apoyarlo. Ha remarcado que esa reforma debe hacerse básicamente entre el PP y el PSOE.
El presidente del PP ha defendido así su postura: «La Jefatura del Estado se está desarrollando de manera impecable, y no hay necesidad leal de reforzar un Reinado ejemplar. Ahora bien, si el Gobierno plantea el reforzamiento de la institución frente al ataque de sus socios, nosotros estamos de acuerdo en que se haga». «Si considera que no debe haber un resquicio para las críticas de sus socios, estamos de acuerdo en estudiarlo. El problema no es la Monarquía, es el Gobierno, la división, al radicalidad y su incompetencia».
Casado ha explicado que este año los españoles han sufrido cinco crisis: la sanitaria, la social, la económica, la institucional y la política. «Los únicos que han salido mas fuertes son los socios del Gobierno, aquellos que dicen que su objetivo es debilitar a España».
El líder del PP ha defendido su actuación a lo largo del año y ha subrayado que remó a favor del estado de alarma «hasta los 40.000 fallecidos». Casado ha exigido al Gobierno que reconozca la cifra real de muertos por la pandemia, que ya está por encima de los 70.000 según el INE.
En su balance, Casado ha advertido a Sánchez de que el PP vigilará muy de cerca la gestión de los fondos europeos, y ha anunciado la creación de una comisión de seguimiento dentro del PP, formada por exministros, ex altos cargos, eurodiputados, diputados y senadores, que vigilarán muy de cerca para denunciar si se producen irregularidades, clientelismo y actuaciones arbitrarias. Además de gestionar bien los fondos, Casado exige un plan de reformas al Ejecutivo.
«Si nosotros estuviéramos en el Gobierno y hubiésemos hecho lo que ellos han hecho, estaríamos con la sede tomada y no podríamos salir de casa», ha comentado Casado. A su juicio, el momento en que la sociedad española se tiene que «rebelar» contra el Gobierno será en las urnas. «Tenemos que fortalecer una alternativa que aglutine a todos aquellos que no están contentos con este Gobierno».
Sobre la situación interna del PP, y en concreto sobre Madrid, Casado ha elogiado la «gran gestión» de Isabel Díaz Ayuso durante la pandemia, a pesar de los ataques que sufrió del Gobierno. «Tengo la satisfacción que cuando confié en Ayuso para encabezar la candidatura sabía que era una gran política y me alegro de que haya gente ahora que se esté dando cuenta».
Sobre los congresos regionales del PP, en julio de 2022 «toca» el congreso nacional. «Queremos un fortalecimiento de estructuras provinciales y autonómicos a tiempo de próximas elecciones». «Los autonómicos serán a partir de otoño del año que viene, y serán los militantes los que elegirán a sus representantes», ha advertido.
