Este rincón del Valle de Tena en el Pirineo combina naturaleza, historia y las vacaciones de la alcaldesa
Panticosa vuelve a ser este verano el refugio elegido por la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, para desconectar de la rutina y recargar energías. En sus redes sociales, la regidora ha compartido la que ya considera una tradición junto a su amiga María: caminar por las sendas del Pirineo aragonés, tal y como llevan haciendo desde que tenían 14 años. “El verano me sabe a familia, a recuerdos, a reencuentros, naturaleza… y a algún que otro ‘¡ojo con la bajada!’”, ha escrito.
El pueblo, que celebra sus fiestas del 14 al 17 de agosto, se convierte en estas fechas en un hervidero de visitantes. Entre sus atractivos, destacan las rutas de senderismo que parten desde el casco urbano, las pistas de esquí y la cercanía al Balneario de Panticosa, un enclave histórico que lleva siglos atrayendo a viajeros.
Chueca, que no ha ocultado su devoción por esta localidad, asegura que lo que más le seduce es la autenticidad del lugar: un equilibrio entre la tranquilidad de la montaña y la vitalidad de sus gentes. Un rincón que, año tras año, se reafirma como su refugio personal y que invita a todo el que lo conoce a regresar.