El Senado afronta este jueves uno de sus primeros grandes días de una legislatura en la que la mayoría del PP le otorga un papel protagonista en la oposición contra un presumible Gobierno de Pedro Sánchez. Desde las 11.00 horas, la Cámara Alta celebra la Comisión General de las Comunidades Autónomas, donde la mayoría de los dirigentes regionales intervendrán en una sesión donde la igualdad territorial, en medio del debate mediático sobre una posible Ley de Amnistía, llenará los titulares.
Hasta Madrid se desplazará el presidente de Aragón, Jorge Azcón, quien, como ya avanzó en el primer Pleno de la legislatura, denunciará la “desigualdad” que provocaría una medida de gracia para los políticos catalanes, generando ciudadanos “de Primera y de Segunda”. “Prefieren una España desigual, en la que se premia al malversador, al sedicioso, al delincuente”, afirmaba el jefe del Ejecutivo, lamentando que “ni ERC, ni Junts ni Bildu van a dejar que estos asuntos se resuelvan de forma favorable para Aragón”.
De hecho, Azcón considera que el principal debate de la legislatura en el Congreso será el territorial y el de la “igualdad entre españoles”, lo que implica también una “necesaria reformulación” del sistema de financiación autonómica. “Una discusión en la que Aragón, donde la prestación de servicios públicos es especialmente onerosa por su dispersión territorial, tiene mucho que decir y mucho que reivindicar. Si el Estado financia en base el número de habitantes, no se conseguirá más que perjudicar a las comunidades autónomas con mayor dispersión de la población, lo que derivará en peores servicios públicos y, en última instancia, pérdida de población”, demandaba.
OBRAS HIDRÁULICAS, PIRINEOS E INFRAESTRUCTURAS
Por otro lado, el líder del Ejecutivo autonómico, que estará acompañado por el resto de presidentes populares -no así los socialistas- y su homólogo catalán, Pere Aragonès, defenderá también lo que ha definido como Agenda Aragonesa, que pasa por la apuesta por las obras hidráulicas, las ayudas al funcionamiento de las empresas, el Plan Pirineos y las infraestructuras, como la A-23, A-22, A-68 o A-40, así como el Canfranc y el Corredor Cantábrico-Mediterráneo. “Aragón necesita estar de nuevo presente en la agenda nacional, precisa que se hable de sus infraestructuras para que las obras más necesarias se ejecuten de una vez”, sostenía en las Cortes.
Así, dentro de esa Agenda Aragonesa incluirá, “como no puede ser de otra forma”, las obras pendientes del Pacto del Agua. “Aragón es agua. El desarrollo del territorio, en especial de las comarcas ligadas al sector agrario, depende del acceso al agua, a los riegos. Por eso es tan necesario ejecutar todas las obras pendientes y que estaban recogidas en el Pacto del Agua”, reclamaba.
Igualmente, el presidente también abordaba en su comparecencia las peculiaridades y necesidades de la provincia de Huesca, con una economía “diversificada”, pero con una “joya”, los Pirineos, que “han generado riqueza durante décadas”. “Es el momento de potenciar esa herramienta a través del Plan Pirineos. En la Comisión en el Senado expondré la necesidad de que el turismo que enriquece los cuatro valles pirenaicos tenga actividad durante todo el año”, afirmaba.
