El silencio impera en el PSOE aragonés desde que Pedro Sánchez dinamitó las listas de la comunidad para las Generales. Los agraciados con un puesto de salida reservan sus opiniones tras la «victoria» que significa ser elegidos por Ferraz. Los más agraviados, aquellos que perdieron sus puestos o fueron relegados a otras posiciones, ya manifestaron su disconformidad con una renuncia masiva.
Florencio García Madrigal era la propuesta del PSOE de Zaragoza al Senado. Un número uno que Ferraz decidió otorgarle al sanchista Miguel Dalmau. «Lo que me han hecho a mí es una aniquilación», resume tajante García Madrigal, que cree que no se tuvo en cuenta las listas presentadas desde el territorio: «Parece que han jugado a los dados y han salido esos números aleatoriamente, sin darle ninguna explicación a nadie».
El militante socialista, con más de 40 años en el seno del partido, definía este hecho como «un ejercicio antidemocrático» que se ha llevado por delante su candidatura: «Es normal que cuando vas a Ferraz te cambien el puesto, por eso no pasa nada; pero desaparecer de la lista es algo inaudito».
El propio García Madrigal abre la puerta a que las listas confeccionadas desde Madrid no cumplan con los requisitos que el propio PSOE se exige: «No son listas cremallera y desactivan las normas básicas de elección». Descarta, sin embargo, recurrir las candidaturas.
Otro de los afectados es Óscar Galeano, propuesto como número dos al Congreso (aunque fue el ganador de las agrupaciones locales) y relegado al tercer puesto de la carrera al Senado. «Me pasó ya una vez así que sé un poco cómo va de esto», comenta Galeano, que asegura que recogerá su acta para las Cortes de Aragón tras renunciar a participar en las listas a los comicios nacionales. «Siempre pienso que hay que ir partido a partido, porque la última decisión la tiene Ferraz», completa el socialista, que «no habrá ninguna explicación y tampoco lo voy a pedir».
Estamos muy contrariados, y no solo nosotros, porque hay varios territorios que han tenido el mismo problema», completa Galeano, que admite «el malestar interno que exige en la formación, así que por disconformidad presento mi renuncia». El silencio más mayúsculo sigue siendo el de los principales líderes aragoneses. En Teruel se remiten al comunicado del pasado domingo, en el que denunciaban sentirse «de segunda» y se definían como «un partido vivo y dinámico que se resiste a jugar un papel secundario». En Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero, responsable provincial del PSOE, declaró a los medios: «Lo que ha pasado nos desacredita como partido. Si no respetamos la democracia interna y la voz de los militantes perdemos la credibilidad ante los militantes»
Este lunes en Madrid, el secretario general del PSOE en Aragón, Javier Lambán, sí se pronunció sobre su ausencia en el Comité Federal en el que se dirimían las listas socialistas para el 23 de julio. «Tenía un menester con mi mujer, que le había prometido hace tiempo un fin de semana», ha comentado el líder de los socialistas aragoneses, que también ha asegurado que «en absoluto» cuestiona el liderazgo de Pedro Sánchez en su partido. Estas declaraciones a los medios tuvieron lugar en la celebración de un acto homenaje a Alfredo Pérez Rubalcaba.
La Comisión Federal de listas del PSOE se reunirá de nuevo antes del 19 de junio, fecha límite para presentar las candidaturas. Será entonces cuando Ferraz rellene los huecos que han quedado ante las dimisiones.