El Papa cancela su agenda a causa de una fiebre

Está descansando en su residencia vaticana, Casa Santa Marta. El jueves explicó que, aunque puede caminar, tiene fuertes dolores de rodilla

«A causa de una fiebre, el Papa Francisco no ha recibido en audiencia esta mañana», ha explicado el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni a quien le preguntaba sobre la misteriosa agenda vacía del Papa este viernes por la mañana. Precisamente ayer reconoció en público dolorosas molestias en la rodilla.

El Vaticano tranquiliza sobre la situación «normal» del Papa. Por su parte, la «prefectura de la Casa Pontificia» ha comunicado a quienes habían sido convocados este viernes que el Papa se excusaba, pero no podía mantener la cita a causa de una «indisposición».

El pontífice, de 86 años, mantuvo una agenda especialmente intensa este jueves, que dejaría sin fuerzas a una persona con la mitad de su edad: ocho reuniones por la mañana y un largo evento en directo por la tarde.

El Papa se reunió por la mañana con empleados del dicasterio para el servicio humano integral; a continuación, estuvo con el nuncio en La Habana, Giampiero Gloder, y luego con el nuncio en Tirana, Luigi Bonazzi. Después, recibió al ministro de energía de Indonesia, que viajó acompañado de su familia. También tuvo una audiencia con el cardenal Luis Antonio Tagle, uno de los dos «pro-prefectos» del dicasterio para la evangelización; y tres encuentros, primero con los sacerdotes y diáconos que se han ordenado este año en la diócesis de Roma, luego con el capítulo general de la Obra de don Orione, y finalmente con quienes están poniendo en marcha el sínodo de la Iglesia italiana.

Por la tarde se retransmitió en directo un evento en el que conmemoró los diez años de la fundación Scholas, y allí el Papa mostró en todo momento muy buen aspecto. El pontífice se conectó por video llamada con personas de cinco países -entre ellos, España-, saludó personalmente uno a uno a los cerca de 200 invitados presentes en Roma, y concedió una entrevista al canal de televisión de EE.UU. Telemundo.

Precisamente, en ese diálogo que el Papa mantuvo con el periodista mexicano Julio Vaqueiro, habló sobre su salud. «(Estoy) mucho mejor», respondió el Papa. «La rodilla se fue arreglando, antes no podía caminar y ahora he vuelto a caminar. Hay días que son más dolorosos, como hoy, y hay días que no, pero eso es parte del desarrollo», reconoció.

«El piropo de los viejos»

La última vez que la salud obligó al Papa a cancelar su agenda fue tras ser ingresado al hospital el pasado 28 de marzo. «Realmente fue una cosa inesperada», recordaba él mismo este jueves durante su diálogo con Telemundo. «Fue una pulmonía aguda que me agarró durante la audiencia (general).

Me dijeron que la agarramos a tiempo, y que, si hubiéramos esperado un poco más de horas, habría sido más grave».

En el diálogo televisado el jueves por la noche y publicado integralmente en Internet, el Papa bromea cuando el periodista le dice que «se le ve muy bien». «Ya estoy en la edad en la que hay que decir, ‘¡Qué bien se lo ve!’. Es el piropo a los viejos», explicó entre risas.