40 jefes de Estado están a punto de llegar a Madrid. El motivo, una de las reuniones más importantes a nivel internacional: la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte ( OTAN). Algunos de los líderes más importantes del mundo se congregarán en la capital española para abordar el panorama mundial, muy agitado por la invasión rusa de Ucrania.
Madrid está blindada, y quien se dé un paseo por sus calles ya ha percibido más actividad de lo normal. Hasta 10.000 agentes serán desplegados para garantizar la normal celebración de la cumbre, entre otras muchas medidas de seguridad. Sin duda, la ciudad está ante todo un desafío logístico, aunque ya ha demostrado en numerosas ocasiones que puede albergar eventos exigentes.
No obstante, es irremediable que un acontecimiento de tal calibre trastoque el día a día de los ciudadanos. Muchas calles serán cortadas, lo que supondrá un aumento de las retenciones de tráfico en una urbe que ya vive en un atasco constante. De hecho, la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, ha instado a los ciudadanos a teletrabajar en la medida de lo posible. «Los madrileños hemos recibido muchos eventos de estas características, sabemos cómo convivir con ellos, disfrutarlos y manejarlos. Hacemos un llamamiento al teletrabajo y restringir los movimientos porque va a ser complicado el movimiento por Madrid en determinadas zonas», ha señalado González.
Teletrabajo
Pero habrá muchos que no puedan quedarse en casa trabajando y tendrán que hacer frente a esas horas de más en el coche o en el transporte público para llegar a sus empleos. En lo referente al transporte público, el Ayuntamiento de Madrid reforzará las líneas de autobuses 104, 122 y 73 de la EMT y el Gobierno regional hará lo propio con las líneas 1, 5, 6 y 10, y si fuera necesario, las 4 y 9 de Metro de Madrid.
A pesar de los esfuerzos por parte de las autoridades, muchas zonas se verán afectadas por la cumbre de la OTAN. La principal será Ifema, pues en el recinto ferial tendrán lugar los actos del cónclave. Es por ello que la línea de Metro correspondiente a Ifema permanecerá cortada los días 28 y 30 de junio, ambos incluidos.
Además del entorno de Ifema, el Paseo de la Castellana también quedará restringido completamente al tráfico. Es decir, ningún vehículo podrá transitar desde la Plaza de Castilla hasta la estación de Atocha. Por ello, los alrededores de la principal arteria madrileña serán un hervidero de coches y los lugares a evitar siempre que sea posible.
Ante las complicaciones ocasionadas, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha pedido paciencia a sus conciudadanos.
Además, el alcalde ha anunciado que los autobuses de la EMT serán gratuitos los días 28, 29 y 30 de julio.
