Von der Leyen: “No arriesgaremos los valores de la UE en Polonia”

La Comisión Europea no se quedará de brazos cruzados ante la deriva autoritaria en Polonia. La presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, ha comparecido esta mañana en el hemiciclo europeo de Estrasburgo (Francia) para anunciar que la Comisión Europea sigue analizando todos los instrumentos a su alcance, aunque no ha dado plazos ni detalles.

“No podemos arriesgar ni arriesgaremos nuestros valores comunes. La Comisión actuará”, ha asegurado la política alemana como respuesta al reciente fallo del Tribunal constitucional polaco que cuestiona la primacía del derecho europeo sobre el nacional, lo que abre la puerta a la desobediencia sistemáticas de las sentencias del Tribunal de Justicia Europea y abre un escenario inédito en el club europeo.

Entre estas medidas que la Unión Europea puede tomar, se encuentra la activación del mecanismo  que supedita la llegada de los fondos europeos al respeto al derecho comunitario. Una herramienta que está en vigor desde principios de este año, pero que Bruselas se resiste a poner en marcha a pesar de las constantes presiones de la Eurocámara. De momento, la Comisión Europea ha bloqueado la aprobación del plan de recuperación europeo para hacer frente a los estragos del coronavirus, del que a Varsovia le corresponden 36.000 millones de euros entre subvenciones a fondo perdido y préstamos.

La Comisión Europea está analizando cuidadosamente este fallo, pero esto es lo que puedo decir por el momento: estoy muy preocupada. Esta sentencia pone en cuestión los fundamentos de la Unión Europea. Es un cuestionamiento directo a la unidad del orden legal europeo. Sólo un orden legal otorga derechos iguales, certeza legal, confianza mutua entre los Estados miembros y por lo tanto políticas comunes. Es la primera vez que el tribunal de un Estado asegura que los Tratados europeos son incompatibles con la constitución nacional”, ha explicado la presidenta de la Comisión Europea.

A pesar de las amenazas y sabiendo que pocos minutos después era el primer ministro polaco el que iba a intervenir para dar su versión de lo sucedido, Von der Leyen ha terminado también su intervención con una rama de olivo y ha recordado a aquellas figuras polacas: desde al Papa Juan Pablo II hasta el líder del sindicato Solidaridad, Lech Wallesa, que volvieron a acercar a Polonia al proyecto europeo tras la caída del Telón de acero, después de décadas de secuestro de las libertades por parte del régimen comunista.

“Lamento profundamente que nos encontremos en esta situación. Siempre he estado a favor del diálogo y siempre lo estaré. Esta situación debe resolverse. Queremos una Polonia fuerte en una Polonia unida. Queremos una Polonia en el corazón de nuestros debates y construyendo un futuro común”, ha asegurado la presidenta del Ejecutivo comunitario antes de terminar su alocución con un “Polonia has estado y estarás en el corazón de Europa”, en inglés y polaco.

Pero nada indica que Varsovia tenga intención de recular, al menos por ahora. El primer ministro polaco, Mateusz Maorwiecki ha acusado al club comunitario de estar aplicando una doble “vara de medir” con Polonia y de  estar utilizando el “chantaje financiero” con el país. Unos argumentos muy parecidos a los esgrimidos estos últimos días, ya que ayer mismo el primer ministro polaco envió una carta a sus homólogos europeos en las que les advierte de que el  club comunitario puede convertirse en un “organismo administrado de manera centralizada por instituciones desprovistas de control democrático”, lo que puede derivar en un “fenómeno peligroso que amenaza el futuro de nuestra unión”.

Este jueves y viernes se reúnen los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete en la tradicional cumbre del mes de octubre y, aunque de momento, este tema no ha sido introducido en la agenda del encuentro, hay países como Holanda que ya han solicitado hablar de ello.