El chavismo suspende el diálogo con la oposición en protesta por la extradición de Saab a EE.UU.

El régimen de Nicolás Maduro ha suspendido su participación en la negociación que había mantenido con la oposición desde el 13 de agosto en México. La decisión ha sido anunciada por el jefe de la delegación del chavismo, Jorge Rodríguez, este sábado, luego de la extradición del testaferro de MaduroAlex Saab, a Estados Unidos desde Cabo Verde donde estuvo detenido desde junio de 2020 por delitos de lavado de dinero. Hace un mes, el Gobierno chavista había incluído al empresario colombiano como «miembro pleno» de la delegación de Maduro, una de las tantas maniobras ejecutadas para salvarlo de la inminente extradición.

Para este domingo, los representantes de las dos fuerzas políticas de Venezuela tenían programada la cuarta ronda de conversaciones que corresponde a la negociación con la que se busca sacar al país sudamericano de la acuciante crisis. «El Gobierno suspende su participación en la mesa de diálogo en México», ha dicho Rodríguez en un comunicado televisado sin aclarar si será temporal, o definitivo como ha ocurrido en cuatro negociaciones anteriores.

«No asistiremos a la rueda de negociación que se realizaría mañana domingo en México. Culpamos al gobierno de Iván Duque (presidente de Colombia), (el presidente interino Juan) Guaidó, Leopoldo López, Carlos Paparoni (miembro de la delegación opositora). Nosotros defenderemos a nuestro compañero Alex Saab», ha agregado. Guaidó por su parte ha respondido a través de su cuenta en Twitter: «Con la irresponsable suspensión de su asistencia a México, evaden de nuevo la atención urgente al país, que hoy sufre con 76.6% de pobreza extrema».

Saab quedó detenido en el archipiélago africano de Cabo Verde cuando viajaba en un avión privado con matrícula venezolana desde Rusia y con destino a Irán. La advertencia que meses anteriores había hecho Washington contra el empresario colombiano quedó materializada en el momento en que la aeronave aterrizó en Cabo Verde para repostar combustible. En diciembre de 2020, Maduro lo designó como embajador plenipotenciario de la Misión de Venezuela ante la Unión Africana, con sede en Etiopía, para buscar una inmunidad diplomática que lo liberara, sin embargo, sus intenciones fueron en vano.

El testaferro de Maduro ha estado desde 2019 bajo la implacable mirada de la Casa Blanca. En ese año fue sancionado por ser uno de los hombres que más negocios sucios ha hecho con el chavismo y al que se le vincula con grandes tramas de corrupción. El empresario de origen libanés está vinculado además a múltiples delitos como lavado de activos, asociación delictiva, enriquecimiento ilícito y estafa.

Posible represalia

Los hermanos José Luis y Alirio Zambrano, y José Pereira Ruimwyk, exdirectivos de la filial de Petróleos de Venezuela en Estados Unidos, Citgo, fueron arrestados de nuevo la tarde de este sábado. Todos ellos cumplían arresto domiciliario desde mayo de 2021 y no se descarta que haya sido una represalia por la extradición de Saab. «Estamos muy preocupados, porque ya nos pasó en 2019 que hubo represalia y fuimos llevados al Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional)», dijo Pereira Ruimwyk en un vídeo que difundió por las redes sociales, minutos antes de ser trasladado a la sede del servicio de inteligencia del régimen.

Al respecto, Guaidó ha condenado en Twitter que en Venezuela «la dictadura se exhibe utilizando un sistema de justicia secuestrado como herramienta de tortura y persecución a Roberto Deniz (periodista venezolano que publicó un trabajo sobre la corrupción de Saab) y su familia, y a los miembros de Citgo, en evidente represalia».

Los exdirectivos de Citgo quedaron arrestados en 2017, después de que el régimen los invitara a una supuesta reunión de negocios. Los ‘6 de Citgo’ como se les conocen en Venezuela -cinco son ciudadanos estadounidenses y uno tiene residencia- se encontraban en Estados Unidos y viajaron a Venezuela bajo engaño. En diciembre de 2019 recibieron la medida prisión domiciliaria, pero dos meses más tarde fueron llevados a la cárcel nuevamente. Fue en noviembre de 2020 cuando recibieron una condena del Tribunal Supremo de Justicia por supuesta corrupción, ignorando las solicitudes de Washington para que fuesen liberados.

José Pereira Ruimwyk, expresidente de Citgo, fue condenado a 13 años y 7 meses de prisión por los presuntos delitos de malversación, cohecho y asociación ilícita. Mientras que a los exdirectivos Tomeu Vadell, Jorge Toledo, Gustavo Cárdenas, José Luis Zambrano y Alirio Zambrano fueron sentenciados a 8 años y 10 meses por supuesto cohecho y asociación ilícita.