Casado desborda la plaza de toros de Valencia: «El cambio ya está aquí»

Pablo Casado ha entrado en la plaza de toros de Valencia al grito de «presidente, presidente» y entre aplausos de miles de personas, que han llenado el coso taurino, icono electoral del PP durante muchos años, y que dejó de serlo en las generales de 2015. Unas 9.000 personas han podido entrar a la plaza y otras 3.000 se han quedado fuera, según la organización. «¡El cambio ya está aquí!», ha exclamado Casado, que ha anunciado tres planes estratégicos urgentes para reactivar España en cuanto llegue al poder, uno institucional, otro económico y el tercero centrado en las familias, con la libertad como bandera.

En el tendido, pancartas de apoyo a Pablo Casado, como estas: «Madrid con su presidente», Valencia con Casado», «Madrid con Casado», «¡Libertad!», «Casado a La Moncloa»… Justo antes de empezar este acto de cierre de la convención nacional del PP, Casado ha saludado a los que no habían podido entrar a la plaza, por las medidas de seguridad antiCovid. Al entrar ha dado la vuelta al ruedo (por el callejón), entre más gritos de «presidente, presidente». La fiesta se ha aguado al final, después de casi tres horas de acto, por el fuerte calor. Parte del público se ha ido antes de que Casado acabara su discurso, de alrededor de una hora bajo un sol de justicia en la plaza.

Entre el público, los cinco barones autonómicos y el presidente de la Ciudad Autónoma de Ceuta, que esta vez han quedado en un segundo plano para no robar ningún protagonismo al presidente del partido. Dirigentes del PP han mostrado su satisfacción al ver la plaza llena de nuevo: «El partido está más vivo que nunca».

En un lugar tan emblemático para el PP como es la plaza de toros, Casado ha tenido un recuerdo especial para Rita Barberá: «Aquí está otra vez el Partido Popular llenando la plaza de toros de Valencia. Este es el preámbulo de otra gran victoria para recuperar el ayuntamiento y devolver la grandeza que tenía Valencia con la gran Rita Barberá. Muy pronto continuarás su legado».

«Aquí seguimos, con el partido unido como una piña y fuerte como una roca, preparados para volver a echarnos el país a las espaldas, para rescatar a nuestros compatriotas de la ruina y para abrir un nuevo horizonte para España», ha proclamado el presidente del PP, en un discurso en el que no ha mencionado a Pedro Sánchez ni una sola vez.

«Aquí estamos otra vez con la cabeza alta, las manos blancas, los bolsillos limpios y el corazón enamorado de España», ha señalado ante un público volcado, en una mañana en la que ha caído un sol implacable sobre la plaza de toros, y en la que se ha producido algún golpe de calor en el graderío.

«El cambio ya está aquí. Estamos preparados. Pueden confiar en nosotros. Sabemos dónde vamos. Tenemos un plan para España. Estaremos a la altura de los tiempos y no defraudaremos a nadie», ha asegurado a Casado.

El líder del PP se ha referido a los nuevos partidos como Ciudadanos: «Los que vinieron a sustituirnos se han ido quedando por el camino. El PP es mucho PP y hemos hecho lo correcto: primero ofreciendo unidad y cuando la rechazaron, haciéndola por la base».

Casado ha ofrecido a los españoles un «nuevo contrato social, un contrato con España», para devolver el poder a los ciudadanos, limitar el Gobierno, reforzar las instituciones y la Justicia, crear empleo y sostener nuestro bienestar

Casado ha sido especialmente claro al hablar de los independentistas catalanes: «Que nos oigan bien: Cataluña es libre porque es española y lo seguirá siendo a pesar de los indultos y mesas de la vergüenza. Y quiero decir una cosa muy clara ahora que se cumplen 4 años del 1 de octubre. Hicimos lo que teníamos que hacer entonces y haremos lo que tengamos que hacer en el futuro».

Una de las mayores ovaciones para casado ha llegado cuando se ha referido a Puigdemont: «Traeremos a Puigdemont al Tribunal Supremo, aunque tengamos que viajar hasta el último país de Europa para exigir el respeto a nuestra Justicia. Ya está bien de impunidad con los golpistas».»¡Puigdemont, a prisión!», ha coreado el público.

Otra de las grandes ovaciones en la plaza de toros ha llegado cuando Casado ha exclamado que España no tiene que pedir perdón a nadie: «España no tiene que pedir perdón a nadie ni por nada, al revés nos deben dar las gracias por nuestra contribución a América con el acontecimiento más importante de la humanidad, después de la romanización, que es la Hispanidad. Se acabaron las leyendas negras y esa cultura de cancelación suicida a la que ponen los coros desde el propio Gobierno».

Casado ha abierto las puertas del PP a los constitucionalistas para formar una amplia mayoría: «El Partido Popular se fundó para unir a todo lo que estuviera a la derecha del PSOE, pero ahora también tenemos que conseguir la unión de todos los constitucionalistas».

«Queremos que vuelvan todos los liberales y los conservadores, que confíen en nosotros los socialdemócratas defraudados por el sanchismo que pacta con los amigos de los asesinos de concejales socialistas y con los nacionalistas radicales que llaman bestias taradas a los españoles».