Un Barça digno pero muy limitado

Balaídos fue una prueba, pero el Sevilla es más importante y empezó mandando y casi marca de córner en el minuto 4. Ganar en Balaídos fue simbólico, pero el equipo de Ronald Koeman se medía por primera vez con un equipo de entidad, sólido. Y realmente todo fue andaluz en los primeros instantes: el Sevilla era el protagonista, mandaba en campo rival, tenía el balón y el Barça iba a remolque, aunque sin demasiados apuros, hasta que De Jong marcó en el minuto 7, también a la salida de un córner. Marcó de un potente disparo que tal vez Ter Stegen habría rechazado pero que Neto, sin llegar a ser culpable del gol, no tiene su talento, no pudo hacer nada. Araujo también estuvo lento. Pero de todos modos poco duró la ventaja sevillana porque al minuto siguiente, una gran asistencia de Messi a Jordi Alba, interrumpida por Navas, la cazó Coutinho para el empate. Messi y Alba se saben tanto esta jugada que sus compañeros saben aprovecharla cuando no les sale exacta.

Al Barça le faltaba hacerse con el partido: el Sevilla ganaba los duelos directo, tenía el balón y Ansu estaba inusualmente tímido. Griezmann, como siempre, nada. Salía con fuerza el Sevilla desde atrás, generando más que peligro, vértigo. Pero en el 18, lo que Navas centró no supo rematarlo Fernando. El Barça sufría pero daba la cara.

Koeman se nos está poniendo hermoso. Está fondón, el puñetero. De momento no es grave, pero a este paso tendrá que someterse al rigor de la doctora Torrejón. El Sevilla hacía todo lo que al Barça se le suponía, y además le salía bien. Al Barcelona le era casi imposible trenzar una posesión larga: ordenado en defensa, vertical en ataque, pero incapaz de controlar el partido. De Jong, muy fallón -ha empezado mal la temporada- le hacía regalos al Sevilla que eran lo que su equipo menos necesitaba. Koeman hablaba más con sus ayudantes que con sus jugadores, a los que no les dijo prácticamente nada. Coutinho trabajaba bien la presión, recuperaba más balones que nadie. Messi no podía con Koundé, Ansu continuaba sin comparecer. Griezmann no llegaba a absolutamente a nada. Sólo 7 participaciones en el juego durante la primera mitad. Ansu 24, Coutinho 26, Messi 27. Tenemos un problema con el francés.

El Barça con Koeman ha dejado de ser horizontal para ser la encarnación de verticalidad. En defensa, y esto también hace años que no lo veíamos, Ronald hace lo que le solían hacer al Barça: marcaje al hombre, uno a uno. El Sevilla, más trabajado como equipo que este Barça nuevo que está en la fase todavía de ir aprobando asignaturas.

Sin gasolina

El Sevilla tenía el equipo tan arriba que facilitaba que el Barcelona encontrara espacios para salir muy rápido, pero ahí estaba Griezmann para hundir cada esperanza. Koeman notó que al equipo le faltaba gasolina y rompió su norma de hacer los cambios en el minuto 70. En el 60 entraron Trincao y Pedri por Griezmann y Ansu Fati. Lopetegui dio entrada a dos delanteros: En-Nesyri y Munir. Partido aburrido, dormido, y que hacía dormir. Araujo nos despertó de golpe chutando al larguero, pero de la portería del Barça. El Sevilla no se deshacía y el Barça seguía aguantando. El valor de Koeman de apostar por los jóvenes incluso en partidos necesitados. Poco a poco el Sevilla se crecía, acelerado por los cambios, y cada vez jugaba más cerca del área del Barcelona. Era todo tan poco emocionante que hasta Messi se aburría y no sabía exactamente qué hacer. Pobre segunda mitad de los azulgrana. Digna, pero pobre, como aquel tipo de gente que dice que el dinero no hace la felicidad, y todos sabemos que es porque no tienen dinero. El Sevilla iba subiendo el tono de su participación y el Barça pues eso, como los padres que llevan a a sus hijos a la pública y dicen: «Sí, es pública, pero es que es muy buena y nos gustaba más que las privadas en las que habíamos pensado». Y has de esforzarte para que no se te note lo que piensas en la cara y asientes con cara seria y vas repitiendo: «Claro, claro». Desde la reanudación hasta el 81, el Barça no había chutado. Pjianic entró por Coutinho. Dest entró por Alba.

Messi tuvo un disparo pero le salió de clase media. De Jong, el del Barça, tuvo un remate claro pero Koundé desvió el remate a córner. Trincao casi marca. Es posible que Koeman esté construyendo algo que merezca la pena, pero por el momento este equipo da para sobrevivir -y gracias- contra el Sevilla. Es verdad que en el fútbol, como en la vida, todo son ciclos, pero este Barça es como despertarte en tu casa de Pedralbes de toda la vida y darte cuenta de que en lugar de estar en tu cama te has convertido en la chica del servicio.

Ficha de partido

Estadio: Camp NouFC Barcelona

  • 13Neto
  • 30Ronald Araújo
  • 18Jordi Alba
  • 20Sergi Roberto
  • 3Piqué
  • 14Philippe Coutinho Correia
  • 21Frenkie de Jong
  • 22Anssumane Fati
  • 7Griezmann
  • 5Busquets
  • 10Messi

Sevilla

  • 13Bono
  • 16Jesús Navas
  • 12Jules Koundé
  • 19Marcos Acuña
  • 20Diego Carlos Santos Silva
  • 8Jordán
  • 25Fernando
  • 10Rakitic
  • 9Luuk de Jong
  • 5Lucas Ocampos
  • 7Suso
  • Banquillo
  • 19Martin Braithwaite
  • 16Pedro González
  • 28Ricard Puig Martí
  • 17Francisco António Machado Trincão
  • 2Sergiño Dest
  • 26Ignacio Peña
  • 32Santiago Ramos Mingo
  • 11Dembelé
  • 36Arnau Tenas
  • 8Pjanic
  • 6Aleña
  • 29Konrad De la Fuente
  • Banquillo
  • 17Alejandro Pozo
  • 22Franco Vázquez
  • 6Nemanja Gudelj
  • 21Óliver Torres
  • 24Carlos Fernández
  • 14Óscar Rodríguez
  • 15En-Nesyri
  • 18Escudero
  • 1Tomás Vaclik
  • 31Javier Díaz
  • 11Munir
  • 3Sergi Gómez
  • Goles
  • Philippe Coutinho Correia 9′
  • Goles
  • Luuk de Jong 7′

Árbitro: Jesús Gil Manzano