El nuevo PGOU de Teruel propone dejar fuera del casco urbano el futuro hospital

El futuro hospital de Teruel, que se está construyendo en terreno rústico a unos cuatro kilómetros del Centro Histórico, estará rodeado exclusivamente de monte y fincas agrícolas y solo unido al resto de la ciudad por los viales que se realicen a tal efecto. El borrador del avance del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que regirá el desarrollo de la capital turolense en los próximos 20 años, no contempla suelo urbanoen el entorno del centro sanitario, lo que impedirá que surjan allí viviendas, comercios o cualquier otro tipo de servicios.

La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, que junto con el concejal de Urbanismo, Juan Carlos Cruzado, y el primer teniente de alcalde, Ramón Fuertes, ha ofrecido este jueves detalles del nuevo planeamiento para la ciudad, ha considerado que el entorno del futuro hospital, conocido como El Planizar, es, desde el punto de vista orográfico, «la peor zona de Teruel», con muchos montículos y fuertes pendientes. Por ello, explicó, resultaría «difícil» desarrollarlo urbanísticamente. Ha agregado que es «innecesario» proyectar allí viviendas porque las 5.000 que se quieren crear en base a la previsión de crecimiento poblacional para los próximos años pueden levantarse en los huecos que quedan ahora en el casco urbano.

Buj ha subrayado que, no obstante, una vez esté abierto el nuevo hospital, el Ayuntamiento remodelará el servicio de autobús urbano para que cada quince minutosun bus salga de la ciudad hacia el centro sanitario de El Planizar y a la inversa. El cambio con respecto a la accesibilidad del actual hospital Obispo Polanco será notable, pues este se encuentra en el Ensanche, uno de los barrios más poblados de Teruel al que la mayoría de pacientes y profesionales acude a pie.

Ramón Fuertes destacó que el nuevo PGOU diseñará una ciudad «compacta», evitando la aparición de «barrios dormitorio» que no resultan sostenibles al estar lejos de la mayor parte de los servicios y obligar a sus vecinos a continuos desplazamientos en coche. El documento, cuyo debate por parte de la ciudadanía arranca la próxima semana, cuando será mostrado a colegios profesionales y asociaciones vecinales, persigue avanzar en la peatonalización del Centro Histórico y en la creación de zonas verdes, hasta alcanzar una proporción de 7,33 metros cuadrados de jardines por habitante, por encima de los 5 metros cuadrados por persona que fija la normativa.

El planeamiento prevé que Teruel cuente en el año 2039 con 39.700 habitantes y un total de 24.000 viviendas. El Ayuntamiento quiere, en aquellos casos en los que sea posible, regularizar las casas que se han construido sin licencia en las últimas décadas y prohibir que aparezcan más en suelo no urbanizable. Para acabar con los solares abandonados en el centro de la ciudad, el Consistorio sacará a subasta aquellos espacios en los que no se haya edificado en los dos años siguientes a su adquisición.

Buj expresó su confianza en que, a través de los procesos participativos abiertos, los ciudadanos «ayuden a elaborar el mejor plan posible y que este sea querido por todos». Añadió que el PGOU «será realista y mejorará la ciudad actual de una forma sostenible social y económicamente».