Los empresarios reclaman al próximo Gobierno reducir la deuda pública y rebajar los costes laborales

A la espera de que fructifiquen las negociaciones para formar nuevo Gobierno, los empresarios tienen claras cuáles son sus exigencias y reclamaciones para el próximo gabinete y las principales pasan por reducir la deuda pública, rebajar los costes laborales que afrontan las compañías y perseguir con más ahínco el fraude fiscal. Por ese orden. Además, siete de cada diez considera que la economía española está estancada o desacelerándose de forma suave a moderada.

Son dos de las conclusiones que se extraen de la última oleada del International Business Report (IBR) elaborado por la consultora Grant Thornton entre una muestra de 400 ejecutivos de nuestro país, a quienes se les preguntó, con carácter previo a las elecciones del 10 de noviembre, qué esperaban del nuevo Ejecutivo y cómo veían la situación económica.

Sobre esto último, el 31,2% diría que la economía del país se está estancando, frente al 22% que piensa que está desacelerándose de forma suave y el 16,6% que considera que lo está haciendo de forma moderada; sólo el 23,9% percibe que está creciendo de forma suave y el 6,3% de forma moderada. Lo cierto es que el crecimiento de la economía española se ha desacelerado en los últimos trimestres respecto a los años anteriores, en línea con el frenazo de la economía que se ha registrado tanto a nivel europeo como a nivel global.

De hecho, varios organismos han rebajado estimación de crecimiento para España en los próximos ejercicios. El Banco de Españarecortó sus pronósticos de avance del PIB del 2,4% al 2% para este año; del 1,9% al 1,7%, para 2020 y del 1,7% al 1,6% en 2021, motivado por la corrección que llevó a cabo el INE y por la desaceleración económica. También lo hizo la OCDE al rebajar sus previsiones de crecimiento en dos décimas para 2019, hasta el 2%, y en tres décimas para 2020, hasta el 1,6%.

La Comisión Europea, por su parte, no sólo modificó las previsiones de crecimiento para 2019 (de 2,3% a 1,9%), sino que también puso el foco en otros desequilibrios que pueden suponer un problema para España, como el déficit o la deuda pública. Y precisamente esta última es, para los directivos encuestados, uno de los principales retos del próximo Gobierno, sea cual sea su signo.

DÉFICIT Y DEUDA PÚBLICA

La deuda pública de España se situó en septiembre en el 97,8% del PIB, lejos del 95,9% comprometido con la Unión Europea, según los últimos datos del Banco de España.

De acuerdo con Alejandro Martínez Borrell, presidente de Grant Thornton, «la principal demanda de los empresarios españoles está en línea con los últimos anuncios de la Comisión Europea, que apuntan a la existencia de desequilibrios macroeconómicos en España, debido a nuestro elevado nivel de deuda pública en un contexto de alto desempleo y débil crecimiento de la productividad».

Tras la educación, la segunda cuestión a la que los empresarios creen que el nuevo gobierno debería dedicar mayores esfuerzos es el mercado laboral. En concreto, siete de cada diez empresarios muestran su preocupación por el actual marco laboral y reclaman al Gobierno medidas durante la próxima legislatura.

INCENTIVOS FISCALES

También les preocupa la fiscalidad. Un 20% cree que, entre las primeras medidas que debería tomar el próximo Ejecutivo, se encuentra la reducción de impuestos a las empresas. Además, demandan más incentivos fiscales para facilitar la internacionalización de las firmas españolas, algo que contrasta con algunas de las propuestas que barajan PSOE y Unidas Podemos en el ámbito empresarial.

Diversas organizaciones empresariales han advertido de las consecuencias de propuestas como elevar el Impuesto de Sociedades y han pedido «prudencia» a la hora de implementar los cambios.

«Hemos planteado que en las cosas de la economía, en las cosas del comer, se tenga mucha prudencia y se trabaje con seriedad, y se nos traslada que no nos preocupemos porque se hará con seriedad», aseguró Antonio Garamendi, presidente de CEOE, la semana pasada tras una conversación con el presidente del Gobierno en funciones.

La estabilidad política en relación a la cuestión territorial se muestra también como una de las cuestiones a las que los empresarios españoles otorgan una mayor importancia. Más del 60% de los encuestados pide una solución urgente a una incertidumbre que resulta perjudicial para la atracción de las inversiones y la generación de riqueza.

Preguntados sobre qué grandes cuestiones del contexto internacional deberían preocupar más al Gobierno, los empresarios sitúan en primer lugar a la transformación digital (77%), en segundo al Brexit (63%), y, en tercero, a la guerra comercial entre Estados Unidos y China (62%).