Díaz Ayuso: «Sánchez mintió, derrocó un Gobierno, ha bloqueado el país y nos está sumiendo en el caos»

La presidenta regional madrileña acaba de cumplir cien días en el cargo. Con ilusión, pero conocedora de lo que le espera a una comunidad que es bastión conservador frente a un futuro Gobierno PSOE-Podemos. Un Ejecutivo que, opina, «nace de la hipocresía, de la conveniencia y de espaldas a los intereses de los ciudadanos», y que está convencida de que «irán contra la magia de Madrid, que es la libertad de que cada uno elija el tipo de vida que quiere».

–Se acabó el mandato esperando a que Pedro Sánchez la recibiera…

–Y nada, nunca se supo, nunca respondió.

–¿Se le puede hacer eso a la región que alberga la capital del estado?

–Que no es bueno, está claro.Y ese es el motivo por el que recibió a Torra en cuanto pudo; él es consciente de lo importante que es un presidente autonómico.

–Es decir, que fue totalmente intencionado ningunear a la presidenta de Madrid.

–El socialismo lleva más de dos décadas intentando entrar en Madrid por tierra, mar y aire. Visto que no lo van a poder hacer desde la política regional, lo intentarán desde la nacional: intentan imponernos aquí educación y una política fiscal en contra de los intereses de los madrileños, mientras nos da la espalda en las infraestructuras que teníamos comprometidas: necesitamos hacer ya la conexión para que un AVE de Sevilla pase a Valladolid directamente; necesitamos conectar el AVE con la T-4, necesitamos mejorar las Cercanías que están destrozadas… y todo eso no le conviene ahora mismo hacerlo, y por eso mira para otro lado.

–¿Pueden obligarle a subir los impuestos en Madrid?

–Sánchez ya ha anunciado en numerosas ocasiones que va a hacer todo lo posible por subir los impuestos en la Comunidad de Madrid, atacando nuestra independencia fiscal, intentando armonizarnos a la baja a todas las Comunidades autónomas y de esa manera expulsando al capital privado, porque muchas empresas, cuando vean que aquí no van a poder tener libertad, se irán fuera de España.

El de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias «es un Gobierno que nace de la hipocresía, de la conveniencia y de espaldas a los intereses de los ciudadanos»

–Cree que que se va a materializar ese Gobierno PSOE-Podemos?

–Desde luego, sueñan con ello. Creo que es un Gobierno que nace de la hipocresía, de la conveniencia y de espaldas a los intereses de los ciudadanos.

–¿Qué va a suponer ese Gobierno para los madrileños y para los españoles?

–Lo primero, un ataque contra la política fiscal de Madrid, que lleva 16 años bajando impuestos y creando empleo; después, contra la libertad de empresa, porque Madrid es el motor económico para el resto de España y ellos quieren romper con ello. Y luego quieren acabar con la libertad de horarios comerciales; y no les gusta que las familias decidan el colegio y el tipo de educación para sus hijos. Y sobre todo, irían contra la magia de Madrid, que es la libertad de que cada uno elija el tipo de vida que quiere llevar.

–¿Hasta dónde cree que se puede tensar la cuerda con Cataluña?

–La cuerda está rota porque están rotas las familias. Ahora hay que buscar la manera de hablar con esos dos millones de catalanes a los que han frustrado, a los que les han contado una gran mentira, y explicarles que juntos somos más fuertes, y que dentro de las diferencias se puede estar perfectamente. Y para generaciones futuras, no permitir nunca más que donde haya un abuso en un colegio o de una televisión pública, se mire para otro lado. Tenemos que recuperar la normalidad.

«En Cataluña la cuerda está rota porque están rotas las familias»

–¿Eso puede suponer que haya indultos para los políticos condenados?

–Creo que bajo ningún concepto, jamás, se debería permitir un solo indulto político.

–¿Cree que el PP tiene que ofrecer algo al PSOE para que no tenga que buscar los votos independentistas para gobernar?

–Creo que todo lo que sea evitar que los independentistas tengan poder en España es bienvenido, pero también que ni el socialismo ni Sánchez pueden pedir nada a un partido que de manera ilegítima, políticamente hablando, derrocó cuando estábamos a punto de conseguir los 20 millones de empleos en 2020. Bajo una farsa mintió, derrocó un Gobierno, ha bloqueado el país, nos está sumiendo en el caos y está alimentando las tensiones territoriales. Este presidente no quiere a su país; se quiere a sí mismo.

– Hace muy poco se ha conocido la sentencia de los ERE. ¿Tiene España un problema generalizado de corrupción política?

–No, porque la corrupción política está en el seno de las instituciones cuando hay un sistema establecido, intrínseco, como lo que ocurrió en la Junta de Andalucía durante 40 años. Pero lo habitual, por desgracia, es que en muchos sectores de la sociedad, de la política, de la empresa, del deporte, de la farándula, haya algunos ladrones contados. En España nadie paga a un funcionario para ir a un hospital, o por conseguir una plaza en un colegio, ni nadie soborna a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad;el sistema público funciona, y las instituciones también, pero hay ladronzuelos. El caso andaluz es diferente, porque ahí si ha habido un sistema por el que se ha ido sustrayendo dinero que estaba destinado a una función pública, y bajo ese sistema se han perpetuado en las instituciones algunos políticos que han hecho una red clientelar que les mantenía, mientras generaciones enteras de andaluces no han podido pedir ayudas ni formarse.

Isabel Díaz Ayuso, presidenta regional
Isabel Díaz Ayuso, presidenta regional – MAYA BALANYÀ

–Según su tesis, Bárcenas sería un ladronzuelo.

–Es que yo creo que el caso Bárcenas es incomparable al tema de los ERE. Bárcenas es una persona que ha utilizado su cargo para buscar su red de contactos, para que unos cuantos, que no son pocos, se lucraran. Pero no es igual ni en cantidad, ni en cuantía, ni en gravedad: Chaves y Griñán juntos han sido presidentes del PSOE más de 23 años y han presidido una comunidad autónoma. Imagine que en la Comunidad de Madrid dos ex presidentes fueran condenados y el 50 por ciento de los cargos acabaran en la cárcel o inhabilitados.

–Después de las declaraciones de la ministra Celáa, ha hecho bandera de la defensa de la escuela concertada. ¿Hasta dónde está dispuesta a llegar?

–Hasta donde haga falta: tribunales, declaraciones, lo que sea. Porque no hay dos familias iguales, ni dos personas iguales, y cada personas,para llegar lejos, tiene que encontrar su camino, y la administración solo puede ser un trampolín para ellas. Creo que no puede haber un sistema único, ni un pensamiento único ni unas convicciones morales únicas para adoctrinar.

–Sus palabras a veces son polémicas; como cuando dijo lo del incendio de iglesias.

–Yo dije: “¿Qué es lo siguiente tras la exhumación de Franco, la cruz? ¿Y después qué será, arderéis como en el 36?”, como decía Rita Maestre. Es decir, que esto no tiene fin, cuando siembras odio, recoges más odio todavía. En el último pleno de la Asamblea volvimos con Franco. Y es cierto de que cuando eres presidente tienes que ser más consciente de que tus palabras tienen más repercusión, de que puedes ofender a personas, de que representas a todo el mundo, pero nunca voy a cambiar de opinión ni voy a decir algo diferente a lo que pienso para que me perdone alguien, por que si hago eso no sería yo, y me convertiría en algo convencional, que es buscar siempre lo correcto para que no te digan. Y creo que eso es un error en política.

–¿Pero tiene la sensación de que siempre la están vigilando, esperando que tropiece?

–Mira, han investigado los contratos de las empresas de mis padres, han llamado a sus ex empleados a sus casas, a mi entorno laboral y académico para ver si cada título que he puesto era cierto, han investigado mi pasado sentimental, y esto es así. Es duro, porque siempre van a intentar políticamente acabar contigo. Es muy difícil, pero merece muchísimo la pena. Soy consciente de que todo lo que hago tiene muchísima repercusión.

– ¿Pero la misma repercusión que tendría si fuera un hombre?

–Desde luego, en según qué cosas han ido buscando, no. A mí se me ha cuestionado hasta por la forma de vestir.

–¿Cree que coser empodera?

– Yo creo que empodera más saber inglés, pero sobre todo lo que empodera es que cada uno haga lo que le gusta.

–¿Tenemos un problema en Madrid con los menores inmigrantes no acompañados?

–Lo tiene España y lo tiene Europa. Una vez que están en el territorio, podemos hacer dos cosas: o mirar para otro lado o intentar que se integren. La inmensa mayoría lo hacen, pero con aquellos que no, tenemos que aumentar las medidas de seguridad porque los vecinos y el resto de ciudadanos no tiene porqué soportar esta situación a veces tan complicada. Y si no, buscar mecanismos para que estos menores que no se integran vuelvan. El problema es que el Gobierno de España nos ha dado a la Comunidad de Madrid en todo este tiempo para afrontar este problema 1.500 euros. Así es imposible. Hay una secretario de inmigración que mira para otro lado, un Gobierno de España que mira para otro lado, y todavía nos vienen con el discurso de la concertina y el abrazo fácil.

«En el tema de los menores inmigrantes, hay una secretaria de Inmigración y un Gobierno de España que miran para otro lado, y todavía nos vienen con el discurso de la concertina y el abrazo fácil»

–Acaba de cumplir cien días en el cargo. ¿Los más difíciles de su vida?

–Si; tienes que tomar muchas decisiones en poco tiempo, y sabes que cada una va a afectar, para bien o para mal, a muchísimas personas.

–Se ha quejado de la deslealtad de Ciudadanos.

–Pero en el día a día, veo a los consejeros cada día más unidos, trabajando todos a una.

–¿Ciudadanos ya no hace gobierno y oposición a la vez, como les dijo?

–Es cierto que a veces el grupo en la Asamblea trae sus propuestas, y a veces en un sentido distinto al nuestro, y a veces hacen oposición en la Asamblea y hay que recordarles que ya no, que ya somos un único proyecto.

–¿Se equivocaron al apoyar la comisión de investigación de Avalmadrid?

–Se podía haber evitado que estuviera ahora en marcha. Podrían estar evitando seguir hablando y haciendo circo de una entidad que ya se ha renovado, y que ahora mismo tiene en marcha 11.000 avales, 6.000 empresas tienen sus proyectos hoy vivos, y se han creado 65.000 empleos en los últimos cuatro años.

– ¿Se ha planteado en alguna ocasión acudir voluntariamente a la comisión de Avalmadrid?

–No

–No ve dos gobiernos que circulen en paralelo.

–No.

–Su medida estrella, el abono transporte gratis para mayores, se aplicará de forma progresiva.

–Efectivamente, la situación económica a la que nos vamos a enfrentar en Madrid es todavía incierta. La economía a nivel nacional ahora mismo está en manos de un Gobierno que no hace más que gastar dinero, que ya está amenazando con pactar con un partido como Podemos. Desde el momento que lo dijo, la Bolsa se hundió, y la prima de riesgo empieza a verse perjudicada, y Bruselas no hace otra cosa que llamarnos la atención. Ante esa incertidumbre, no me la puedo jugar aplicando una medida como esta de golpe, junto con el metro 24 horas y las otras 155 medidas sin saber qué presupuesto voy a tener.

–.¿Y no se ha planteado aplicar un filtro por nivel de renta?

–No. Hay muchos otros servicios públicos que se ofrecen y tampoco se miran por le nivel de renta. Este es un gesto de agradecimiento a esas personas de más de 65 años que llevan toda su vida cotizando, un impulso para las economías más perjudicadas y cuya pensión no se va a ver beneficiada por el gobierno de Sánchez.

–¿Qué le pasa con Telemadrid? ¿No le gusta cómo la tratan?

–No , no tiene nada que ver con eso. Yo le pido a Telemadrid lo mismo que a un hospital o un colegio, estamos en una situación económica donde tenemos que ser austeros. Le pido única y exclusivamente que cumpla con la ley, como el resto de los entes, y que sea un servicio público que llegue a todos los rincones de Madrid y hable de Madrid. Mientras todo eso se hace, no tengo ningún problema. Creo que hay una grandísima oferta informativa en Madrid, enorme, decenas de canales, junto con plataformas de pago, junto con la fragmentación en internet, y por eso tienen que esforzarse siempre en tener unos mínimos de audiencia, porque estamos en tiempos más complicados.

–Le está tocando lidiar con Vox. ¿Son más correosos de lo que pensaba?

–Sobre todo en este momento en que hay tantísima incertidumbre a nivel nacional y tanta fragmentación política, Madrid es estabilidad, Madrid es luz, y echo en falta que Vox se centre más en buscar dónde está el enemigo auténtico, que a mi juicio son las políticas del PSOE y de sus socios de posible pacto junto con independentistas.

–En el último pleno le ha recordado Monasterio que usted le debía la presidencia, por sus votos. ¿Nota que le mueven de su espacio ideológico?

–Yo tengo un compromiso con los votantes de Vox a la hora de cumplir el acuerdo que nos dimos para que yo fuera presidenta. A partir de ahí, lo que no puedo hacer es dejarme arrastrar por nadie, por ningún otro partido, y no seguir mis principios por temor a nada, porque mientras yo sea honesta y honrada y cumpla mis compromisos, tengo derecho después a defender lo que creo que es mejor para Madrid.

«En Madrid no hay un problema educativo como lo hay en Cataluña, no quiero que lo haya, y no quiero la política en el aula»

– Lo ha dejado muy claro: pin parental no va a haber.

–Sobre todo es que no es necesario. Yo qjuiero que los padres elijan no sólo el colegio y el tipo de educación para sus hijos; propongo que al inicio de curso vean todas las materias extracurriculares y ellos decidan dónde quieren o no que vayan sus hijos. Lo que no puedes es estar en una clase y que un padre de Podemos y un padre de Vox le digan al unísono al mismo profesor que está bien o mal una asignatura o un contenido. No se puede menoscabar la autorida del profesor bajo ningún concepto, o si no, la calidad de la enseñanza se hundiría. La Comunidad de Madrid cuenta con excelentes profesores que todos los días dan lo mejor de si mismos para que aprendan matemáticas, historia o geografía, y salvo contadas ocasiones, no conozco profesores que vayan buscando ideologizar a nadie. En Madrid no hay un problema educativo como lo hay en Cataluña, no quiero que lo haya, y no quiero la política en el aula.

– ¿Por qué hablamos tanto en la Asamblea de asuntos que no están en la calle, como Franco?

–- Porque es más fácil hablar de lírica que hablar de presupuestos, de bajar listas de espera, de cómo crear empleo. Y al final estamos buscando siempre lo que te da más audiencia. Cuando hablas de lo relevante, a pocos le importa, y cuando estás en el término medio de las cosas, tampoco, pareces más aburrido. Al final, intentan polarizarlo todo, pero en el fondo ni ofrecen soluciones ni están a los problemas reales.

–¿Por cierto, qué le pareció la exhumación de Franco?

–Creo que ha sido todo un circo innecesario. A mi no me gustaría que en el año 2080 en un parlamento, diputados de Podemos de entonces decidan que hay que exhumar a los del PP porque una ley lo dice. Sinceramente, me parece innecesario. Soy firme amante del 78, de ese gran esfuerzo que hicieron los políticos y la sociedad española en ese momento, y defiendo testimonios como los de mis abuelos, que en casa nunca querían hablar de la guerra ni de bandos, y estaban muy orgullosos de entenderse con familias que políticamente eran distintas. Esas generaciones tenían una mentalidad mucho más abierta que muchos jóvenes hoy.

–¿Tiene intención de optar a ser presidenta del PP en Madrid cuando se celebre el congreso del partido?

–Yo me he vuelto muy pragmática: estoy en el tiempo y en el momento. Cuando sea el congreso de Madrid será en de otras muchas comunidades autónomas. Y ahora mismo, el PP a nivel nacional está en algo mucho más importante que el PP, que es España. Ahora toca hablar de gobierno, de futuro para España, y luego ya hablaremos de nosotros.