La mayoría de los españoles, 6,48 millones, un 40% de los que trabajan, ganan entre 1.260,9 y 2.187,2 euros brutos al mes. Así lo ha puesto de manifiesto hoy en INE en el «Decil de salarios del empleo principal» realizado a partir de los datos extraídos por este mismo organismo a partir de los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).
Según el mismo estudio, otro 30% de los asalariados, 4.865 millones, recibieron en 2018 una retritución bruta mensual de más de 2.187,2 euros en 2018. El 30% restante de los trabajados está en la zona baja salarial, con un sueldo inferior a los 1.260,9 euros brutos mensuales.
Durante el pasado ejercicio, el salario medio fue de 1.944,4 euros brutos al mes, con un aumento de 55,4 euros respecto a 2017. Por su parte, el salario mediano se situó en 1.642,3 euros, lo que supuso 52,0 euros más que el del año anterior.
El trabajo del INE pone de manifiesto que la brecha salarial entre hombres y mujeres sigue siendo muy amplia. Los varones tuvieron una mayor concentración relativa en salarios altos que las mujeres el pasado ejercicio. Así, el 35,1% de los hombres ingresaron más de 2.187,2 euros en 2018, frente al 24,5% de las mujeres que recibieron una retribución similar. El salario medio de las mujeres en 2018 fue de 1.708,4 euros al mes, mientras que el de los hombres alcanzó los 2.161,3 euros.
Una de las razones principales de estas desigualdades en salario medio y distribución salarial entre ambos sexos es, según el INE, que las mujeres «trabajan a tiempo parcial, con contratos temporales y en ramas de actividad menos remuneradas en mayor proporción que los hombres».
Por edades, los trabajadores más jóvenes se concentran en los salarios más bajos, mientras que los trabajadores de mayor edad tienen un peso relativo mayor en los salarios más altos. El nivel salarial más elevado de los trabajadores de mayor edad viene determinado, según el INE, «por una mayor proporción de contratos indefinidos, una mayor antigüedad en el puesto de trabajo y más experiencia laboral». Igualmente, el menor nivel salarial entre los grupos más jóvenes viene explicado por «una mayor proporción de trabajo a tiempo parcial y de contratos temporales y por la menor antigüedad». Así, el 65,0% de los asalariados menores de 25 años recibió un salario mensual inferior a 1.260,9 euros en 2018. El porcentaje de los que tuvieron un salario mayor que 2.187,2 euros en esa franja de edad fue del 4,9%. Entre los asalariados de 55 y más años, un 24,1% se encontraba en el tramo bajo del salario mensual (menos de 1.260,9 euros), mientras que un 37,4% estaba en el tramo superior (más de 2.187,2 euros).
El salario medio bruto se incrementó con la edad, pasando de los 1.091,7 euros que, en promedio, percibieron los jóvenes menores de 25 años, a los 2.205,6 euros de los asalariados de 55 y más años.
