La división del PSOE les deja fuera de la dirección de la FEMP, que incorpora a Azcón y Buj

La Federación Socialista Aragonesa llegó dividida al pleno para renovar cargos en la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), y se quedó ayer fuera de la junta de gobierno, el máximo órgano de decisión, en la que sí entraron el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, y la regidora de Teruel, Emma BujLa alegría de los populares contrastaba con la decepción manifiesta desde las filas socialistas, que pagaron muy caro la falta de acuerdo.

La unidad que demandó el secretario general del PSOE-Aragón, Javier Lambán, en el último Comité Regional del partido, en el que advirtió de que no admitirá «divisiones», se rompe de nuevo.

El alcalde de Huesca, Luis Felipe, se quedó ayer fuera de la junta de gobierno de la FEMP al formular el negociador designado por la regional, Juan Antonio Sánchez Quero, una propuesta alternativa que consistía en que él mismo, como presidente de la Diputación de Zaragoza, ocupara el cargo. La cúpula socialista fue salomónica y, al no haber acuerdo, dejó fuera a Aragón, que había tenido presencia en los dos últimos mandatos, y cedió el cargo a otra federación menos relevante pero mejor avenida.

Incluso hubo problemas para designar a los dos miembros que cedieron al PSOE-Aragón en el Consejo Territorial, a modo de compensación. Sánchez Quero, al quedarse su federación fuera de la junta de gobierno, se negó a designar a los representantes,según indicaron fuentes cercanas a la negociación. Ferraz consultó al secretario general por Huesca, Antonio Cosculluela, y el alcalde de Jaca, Juan Manuel Ramón Ipas, fue uno de los elegidos. Para Zaragoza, el PSOE federal optó por la alcaldesa de La Almunia, Marta Gracia Blanco, atendiendo a los resultados electorales.

La alegría se extendió en las filas populares, donde se atendió la petición de Aragón y los alcaldes de Zaragoza y Teruel accedieron a los puestos de mando. Azcón destacó que su puesto en el órgano de decisión de la FEMP es «una buena noticia» para el Ayuntamiento de Zaragoza, pues le permitirá tener «información de primera mano» sobre ayudas y subvenciones que podrían llegar a la capital aragonesa. En la misma situación se encontrará Emma Buj, que repite en la junta de gobierno y que ayer se comprometió a continuar trabajando «intensamente» para mejorar la calidad de vida de los turolenses, «en este caso también desde Madrid».

La satisfacción de Azcón fue doble, pues será el portavoz en la federación de los alcaldes y presidentes de diputación populares, un cargo que supone para él «un honor, un orgullo y una responsabilidad».

La junta de gobierno de la FEMP, que está formada por un presidente, un vicepresidente y 22 vocales, es el órgano encargado de llevar a cabo las propuestas aprobadas en el pleno y se reúne periódicamente para analizar diversos asuntos y tomar las decisiones oportunas. De ahí la importancia de contar con representación en esta asociación que agrupa a 7.364 ayuntamientos, diputaciones provinciales y consejos insulares.