La subida del Salario Mínimo Interprofesional hasta los 900 euros mensuales es una de las medidas «estrella» del acuerdo entre el Gobierno y Podemos, a cambio de su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado de 2019. El incremento, de 164 euros al mes en 14 pagas, tendrá un impacto presupuestario estimado de 340 millones de euros en las arcas públicas. No obstante, la factura final no recaerá sobre el Estado. Serán los trabajadores autónomos los que paguen esta medida, y además por duplicado. La consecuencia directa de este aumento del salario mínimo será que 1,7 millones de autónomos pagarán el año que viene 420 euros más cada uno en impuestos. En total, un hachazo de 725 millones de euros en la cartera de los autónomos.
Subida de la base de cotización
El motivo es que el Salario Mínimo Interprofesional está directamente relacionado con la base mínima de cotización de los autónomos, por lo que la subida del primero implica necesariamente la el incremento de la segunda. Así lo avisó el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, que alertó de que los autónomos que cotizan por la base mínima son la mayoría.
Según las últimas estadísticas del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, al cierre del primer semestre del año suponían el 86% del total de los trabajadores por cuenta propia. De las 2.006.785 personas dadas de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos y el Régimen Especial del Mar, 1.726.000 no superan la base mínima; 120.695 (el 6%) cotizan por entre 1 y 1,5 veces esta base; y sólo 14.495 (apenas el 0,7% del total), cotizan por más de tres veces la base mínima.
Según el Ministerio de Trabajo, el porcentaje de trabajadores por cuenta propia que cotizan por el mínimo supera considerablemente el 90% cuando la edad es inferior a los 40 años, en los extranjeros (95,9%) y entre los que llevan menos tiempo dados de alta (menos de 5 años). Además, mientras que el 84% de los hombres cotiza por mínimos, en las mujeres este porcentaje sube hasta el 89%. Es decir, dentro de los autónomos, estos colectivos serán los más afectados por la medida pactada por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, aunque a cambio mejorarán su derecho futuro a prestaciones y jubilación. «A partir de los 55 años de edad, el 28,4% cotiza por una base superior a la mínima, hecho éste relacionado con la proximidad a la edad de jubilación», afirma el departamento dirigido por Magdalena Valerio.
Con los cambios previstos en el salario mínimo, el presidente de ATA explicó que la base mínima pasará de los 932,7 euros al mes actuales a 1.050 euros. Esto elevará la cuota de cotización desde 277,9 euros al mes hasta 312,9 euros, es decir 420 euros más cada año. «O se limita que los autónomos que no lleguen al salario mínimo tengan una cuota reducida o muchos pasarán a la economía sumergida», avisó Amor. En este sentido, se quejó del acuerdo presupuestario y lo calificó de «pobre y vacío de contenido», dijo en su cuenta de Twitter. Respecto a la adecuación de las cotizaciones a los ingresos afirmó que «ni sabemos cuándo será ni cómo va a ser, sólo una declaración de intenciones para “reformar dentro de 2019…”». En el documento del jueves no se especifica nada respecto a este asunto ni se dan fechas concretas. Gobierno y Podemos se limitan a decir que se garantizará «a los autónomos con menos ingresos una cotización más baja».
Amor también echo en falta la mejora de las prestaciones por cese de actividad, evitar cotizaciones a autónomos con bajas prolongadas y mejorar el acceso de autónomos a la formación. «Nada de nada. De momento, a pagar más», dijo. «Ahora lo siguiente es que salga alguien públicamente diciendo como hace un mes se dijo: “Vamos a bajar los impuestos a los autónomos”», recordó el presidente de esta asociación, que representa a más de 450.000 trabajadores por cuenta propia.
