Rivera propone una reforma electoral que deja fuera del Congreso a los nacionalistas

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha propuesto una nueva ley electoral donde los partidos deban tener «como mínimo el 3% nacional para estar en el Congreso». En las últimas elecciones en 2016, ningún partido nacionalista logró alcanzar esa cifra. Esquerra Republicana fue el que se quedó más cerca con un 2,63% de los votos nacionales. El modo más directo de rebasar esa cifra para ERC sería unirse al PDeCat, que obtuvo un 2,01% de los votos en junio de 2016. Los dos partidos nacionalistas vascos no lograrían el 3% ni siquiera presentándose juntos: el PNV tuvo 1,2% de los votos en 2016 y Bildu, el 0,77%

La propuesta de Rivera se enmarca en una reforma constitucional que solo debe hacerse para «garantizar la unión de los españoles y no para dar privilegios a los separatistas». La intención de Rivera para una nueva ley electoral incluiría «listas abiertas y que todos los votos valgan igual», en  referencia al peso que ahora tienen algunas provincias menos pobladas y que en algún caso puede acabar beneficiando a los dos partidos tradicionales o a los nacionalistas.

Si otros partidos quieren un debate sobre la reforma de la Constitución, Ciudadanos estaría dispuesto a hablar: «Claro que hay que mejorar la Constitución», ha dicho Rivera. El problema para el Gobierno de Pedro Sánchez si quiere abrir este desafío es que estas condiciones serían inasumibles para los nacionalistas.

El anuncio de Rivera se ha producido en Málaga, en el segundo acto de su plataforma España Ciudadana. Hace un mes en Madrid, Marta Sánchez y su himno de España con letra protagonizaron la presentación de este órgano que pretende presentar una «España sin complejos» donde presumir de ser español sea natural y aceptable, y no carca. En aquellos días, sin embargo, Ciudadanos lideraba las encuestas y el presidente del Gobierno era Mariano Rajoy.

Junto a Rivera, el gran protagonista en Málaga ha sido el escritor Mario Vargas Llosa, que ha pedido a los asistentes que tengan «fe en España» porque «es un país maravilloso entre otras cosas por su diversidad y la riqueza de sus lenguas». Durante la presentación, también han participado el exseleccionador español de baloncesto Javier Imbroda y el exdeportista olímpico en hípica y empresario Kike Sarasola, que ha recordado el «espíritu de Barcelona 92» y cómo desfilar tras la bandera que llevaba el entonces príncipe Felipe fue el momento más feliz de su vida tras el nacimiento de sus dos hijos.

El próximo acto de la España Ciudadana será en julio en Palma de Mallorca.