El convenio que hace efectiva la integración del hospital de la Defensa de Zaragoza, más conocido como hospital Militar, en el Salud ya está firmado. La semana pasada, el consejero de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sebastián Celaya, rubricó el documento, al igual que un representante de Defensa tras la aprobación, en última instancia, del Ministerio de Administraciones Públicas.
El último trámite es la publicación de esta fusión en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y en el Boletín Oficial de Aragón (BOA), ya que ambas comunicaciones oficiales supondrán la entrada en vigor de la integración del Militar en la sanidad pública.
La firma del convenio se hizo antes de la moción de censura a Mariano Rajoy presentada por Pedro Sánchez, actual presidente del Gobierno, por lo que el plan no sufrirá ningún retraso y saldrá adelante. Pese a todo, si se hubiera rubricado después, fuentes de la consejería de Sanidad precisaron ayer a este diario que desde el Militar «siempre se han mostrado dispuestos» a culminar el proceso.
COLABORACIONES
El convenio salva la vida al hospital, ya que el cierre de las instalaciones estuvo sobre la mesa en su momento, según admitieron fuentes militares y el propio Celaya el pasado mes de enero, cuando se verbalizó y formalizó la integración.
El Militar lleva más de dos décadas colaborando con la sanidad pública aragonesa y, desde hace años, trata a pacientes derivados por el Salud de las zonas de salud de Casablanca, Seminario y Valdespartera. Además, asume derivaciones en momentos de saturación de las Urgencias y dispone ya de unidades abiertas de Psiquiatría, Geriatría y Medicina Interna.
La vinculación con el Salud es para los próximos cuatro años prorrogables, aunque la titularidad seguirá siendo del Ministerio de Defensa. Además, una pequeña parte del centro seguirá destinada a personal y pacientes militares. De hecho, entre los objetivos de esta fusión está garantizar que los militares una buena formación médica y sanitaria para cuando sean requeridos en misiones. En el Militar trabajan unas 500 personas, de las que solo 117 son personal militar (61 médicos y 18 enfermeros).
Con la integración en el Salud, quedarán asignados al hospital más de 66.500 zaragozanos residentes en los barrios de Valdespartera, Montecanal, Seminario, Casablanca y Torrero-La Paz. Pese a todo, la cifra se irá incrementando de forma progresiva hasta llegar a los 90.000 pacientes, según estimó Sanidad en su momento.
