El presidente aragonés, Javier Lambán, ha anunciado una actuación inmediata en el puente de la Peña, en la A-132, por 2,5 millones de euros, que lo dejará «en perfecto estado de revista» para la finalidad de la vía, que nunca podrá equipararse a la de la N-330 en Monrepós, actualmente cerrado por unas profundas grietas.
Lambán ha contestado hoy en el Pleno de las Cortes a las preguntas de la oposición, tres de ellas relativas a la situación de las comunicaciones en la comunidad tras los fenómenos naturales de lluvias e inundaciones producidas en las últimas semanas, que están en el origen de la aparición de grandes grietas en lo alto del puerto de Monrepós, que obligaron a cerrarlo, y desprendimientos también importantes en la vía alternativa, la carretera autonómica A-132.
La diputada de IU Patricia Luquin ha preguntado al presidente por las actuaciones previstas a corto y medio plazo para mejorar las comunicaciones «con y en» el Pirineo.
El puente de la Peña es un estrecho paso sobre el río Gállego en la A-132, que se utiliza ahora como vía alternativa al Monrepós, en el que hay que dar paso alternativo porque su escasa anchura no permite que circulen por el dos vehículos a la vez.
La A-132 tiene que absorber todo el tráfico que antes pasaba por la N-330 (que es autovía en algunos tramos), a pesar de que, según ha recordado Lambán, «jamás» podrá competir con la carretera nacional porque está diseñada «para otros fines».
Tras los desprendimientos de la madrugada del pasado sábado, que obligaron a cerrar unas horas esta carretera, Lambán ha anunciado que en esta zona, donde se produjo una «situación excepcional» por fenómenos meteorológicos de la que nunca estará «exenta», se están haciendo un estudio geológico y unos ensayos cuyos resultados estarán listos en breve, para poder empezar los trabajos adecuados en unos diez días.
Y se intervendrá en la estructura, la limpieza y la calzada del puente de la Peña, ha agregado, con un presupuesto de 2,5 millones de euros.
Luquin ha insistido por su parte que es necesario que el Pirineo sea «una puerta y no una barrera», y aunque la principal responsabilidad de que esto no suceda es del Gobierno de España, ha reclamado a Lambán actuaciones para que la ciudadanía vea que el Ejecutivo autonómico «se toma en serio» unas reivindicaciones que ya están «hartos» de hacer.
También le ha preguntado por este asunto a Lambán el secretario general de Podemos Aragón, Nacho Escartín, quien se ha interesado por si el Gobierno puede garantizar la seguridad y los servicios esenciales en las infraestructuras de transporte en las zonas afectadas por fenómenos meteorológicos.
El presidente ha insistido en que desde que se cerró el puerto de Monrepós se han garantizado todos los servicios para los ciudadanos, especialmente en sanitario, así como el mantenimiento de la actividad empresarial y comercial.
En el episodio de la reciente crecida de Ebro, ha agregado, hubo una «excelente respuesta» de las administraciones públicas de Aragón, tanto de la autonómica como de las locales y la estatal, pero «a ustedes no se les vio en esos puntos», ha reprochado Lambán, lo que ha generado los abucheos de los miembros de Podemos, cuyo líder sí que visitó la zona afectada, concretamente Novillas, el viernes de la semana pasada.
El presidente aragonés ha reconocido el «buen funcionamiento» de la coordinación institucional y ha dicho que el Gobierno de España ha actuado «de manera diligente» tras la aparición de la grietas en Monrepós, y que también lo hizo la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) durante la crecida.
Respecto a este asunto, Escartín ha reclamado «soluciones efectivas» para poder vivir «bien» cerca del Ebro, en la ribera y de la agricultura, entre ellas un plan integral de gestión de inundaciones.
Le ha exigido a Lambán que no prometa «demagógicamente» cosas que sabe que no va a cumplir, pero este le ha replicado que él se hace eco de lo que le transmiten los afectados cuando se reúne con ellos en lo que respecta a limpiezas del cauce y las riberas, ayudas para completar los seguros o crear zonas de inundación junto al río.
Sobre la A-132, Escartín ha lamentado que transcurridos veinte años desde que ésta pasó a ser de titularidad autonómica, no se ha invertido «ni un solo euro» para mejorarla, pero también ha criticado al Gobierno central, por las partidas «irrisorias» que tradicionalmente destina a las infraestructuras aragonesas en sus presupuestos.
Sobre el mismo asunto, la portavoz de Ciudadanos, Susana Gaspar, ha considerado que la inversión en carreteras debería considerarse un servicio público más, pero el actual Gobierno «tiró la toalla» de las inversiones en ellas a principio de la legislatura.
Si estas se hubieran hecho a su tiempo, ha dicho, hubieran costado cinco veces menos.
Sin embargo, Lambán ha manifestado que el Ejecutivo está haciendo una tarea importante, siempre respetando la prioridad de inversión en servicios esenciales.
En este sentido, ha recordado a Gaspar que «no se puede soplar y sorber a la vez», en referencia al modelo fiscal que defiende Ciudadanos, que «quiere suprimir todos los impuestos» pero sin explican qué gasto dejará de hacer como consecuencia de ello.