El pontífice ha recibido a la delegación aragonesa, que hace unos días inauguró un mural de la Virgen del Pilar en los Jardines Vaticanos
La delegación zaragozana que viajó a Roma a principios de esta semana en peregrinación diocesana con motivo del Jubileo 2025 regaló este sábado al papa León XIV un cachirulo y este lo vistió durante unos segundos. El encuentro, celebrado en el Vaticano, estuvo encabezado por parte aragonesa por el arzobispo Carlos Escribano; el deán del cabildo, Juan Sebastián Teruel; y el vicario de Pastoral, Sergio Pérez Baena.
A su término, este último impuso al Papa el tradicional pañuelo de cuadros rojos y negros y este lo vistió durante unos segundos, antes de quitárselo y entregárselo a un auxiliar.

Desde el pasado martes, un grupo de peregrinos aragoneses se encuentra en Roma con motivo del Jubileo 2025, participando en distintos actos religiosos y sociales. Así, el pasado miércoles asistió a la inauguración de un mural cerámico que representa a la Virgen del Pilar y que se ha instalado en los Jardines Vaticanos junto a los de otras vírgenes de todo el mundo. La imagen es un mural cerámico realizado la empresa de Manises ‘La Cerámica Valenciana. Sucesores de José Gimeno Martínez, S.L.’ y se ha colocado en los jardines a iniciativa de la Conferencia Episcopal Española, que aprobó la idea en diciembre de 2024, y de la iglesia de Santa María de Montserrat de los Españoles de Roma, también conocida como Iglesia Nacional Española de Santiago y Montserrat. El proyecto fue apoyado desde el primer momento por los cabildos de las catedrales de Zaragoza y de Santiago de Compostela.

El Jubileo 2025, también conocido como Año Santo o Jubileo de la Esperanza, es un evento especial de la Iglesia Católica que se celebra cada 25 años. Comenzó el 24 de diciembre de 2024, con la apertura de la Puerta Santa en la Basílica de San Pedro por el Papa Francisco, y se extenderá hasta el 6 de enero de 2026, ya con León XIV, elegido en mayo de este año tras la muerte de su predecesor. El Jubileo lleva por lema Peregrinos de la Esperanza, e invita a los fieles a reflexionar sobre la fe, la reconciliación y la renovación espiritual. En Zaragoza, la fiesta del Corpus Christi en Zaragoza se ha celebrado de manera especial con motivo del Año Jubilar, y ha incluido una misa estacional en la basílica del Pilar.