Unas palabras que han tenido lugar tras las críticas por la decisión de procesar al fiscal general del Estado
La presidenta del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Isabel Perelló, ha expresado este miércoles su apoyo a todos los magistrados del alto tribunal y a los miembros de la Carrera Judicial que soportan “descalificaciones constantes de quienes discrepan de sus decisiones” y ha hecho un llamamiento a autoridades y particulares a que recuperen el respeto que merecen los tribunales y quienes los sirven. Y ha tildado las manifestaciones públicas que cuestionan a jueces concretos de «impropias de un Estado democrático avanzado» al minar la confianza de los ciudadanos.
Unas palabras que tienen lugar justo cuatro días después de que la Sala de lo Penal tomase la decisión de procesar al fiscal general del Estado por un presunto delito de revelación de secretos en la filtración de información confidencial del novio de Isabel Díaz Ayuso. Y es que, a raíz de darse a conocer la decisión de dejar a Álvaro García Ortiz a un paso del banquillo de los acusados, distintos políticos han criticado la decisión del instructor Ángel Hurtado.
En ese sentido, Perelló ha lamentado «la pérdida del respeto que merecen personas e instituciones y, especialmente, los tribunales de justicia y quienes los sirven, haya llegado a niveles que nunca debería haber alcanzado». De modo que ha lanzado un llamamiento tanto a autoridades como a particulares para recuperar ese respeto».
La presidenta del CGPJ ha resaltado que las resoluciones judiciales pueden y deben ser objeto de debate y crítica, pero entiende que «no caben las descalificaciones personales ni los insultos a los jueces, ni tampoco presiones intolerables, ya que socavan el ejercicio de la función que la propia Constitución encomienda al Poder Judicial”. Pues, para ello, “el sistema procesal cuenta con mecanismos de garantía suficientes para corregir las resoluciones que, en su caso, contengan errores”.
Preocupa la independencia judicial
La presidenta del TS y del CGPJ ha asegurado que en el Consejo “preocupa la independencia judicial como base estructural del Estado de Derecho”, ha recordado que este órgano se ha pronunciado ya en diversas ocasiones “reclamando el debido respeto institucional hacia las decisiones judiciales, al margen de los intereses políticos de cada momento” y ha señalado que “la descalificación sistemática desestabiliza la confianza de los ciudadanos en la Justicia y va en detrimento de la sociedad democrática, en tanto que son actitudes que minan la separación de poderes”.
Por otro lado, Perelló ha resaltado la preocupación que hay en el CGPJ con respecto a la independencia judicial como base estructural del Estado de Derecho, y ha recordado que el órgano de gobierno de los jueces se ha pronunciado en diversas ocasiones “reclamando el debido respeto institucional hacia las decisiones judiciales, al margen de los intereses políticos de cada momento”.
“En el Consejo estamos muy preocupados por los intentos de desprestigiar a los jueces. Por ello estaremos vigilantes -ahora más que nunca- en el cumplimiento de nuestra misión constitucional, que no es otra que la defensa de la independencia judicial”. Tras señalar que “atravesamos tiempos difíciles que traen consigo problemas antes desconocidos” y que “todos estamos afectados por el reto que supone afrontarlos”, Perelló ha apuntado que los jueces no son una excepción, “pues deben resolver los nuevos conflictos que se les someten en el contexto de tensión permanente que parece haberse instalado en la vida pública”.
“Además, algunos deben soportar descalificaciones constantes de quienes discrepan de sus decisiones y no dudan en juzgarles, ni en atribuirles propósitos desviados por no decidir conforme a lo que desean quienes emiten estos juicios sin ningún tipo de garantías”, ha agregado, antes de expresar su apoyo “a los miembros del Tribunal Supremo y del resto de la Carrera Judicial que sufren estas actuaciones” y volver a reclamar el respeto institucional debido, “que nunca se debería haber perdido y que es básico para nuestra convivencia”.