La nadadora consigue su tercer metal en unos Juegos Paralímpicos al quedar tercera en la final de la categoría S12.
La nadadora aragonesa María Delgado lo ha vuelto a hacer. La deportista paralímpica ha logrado este sábado la medalla de bronce en los Juegos Paralímpicos de París, al quedar tercera en la final de los 100 metros espalda, en la categoría S12.
Se trata de la tercera medalla que logra en su carrera en unos Juegos Paralímpicos esta zaragozana de 26 años, que comenzó en el alto nivel desde el equipo de Promesas AXA de natación paralímpica. Logró dos medallas de bronce en los Juegos de Río 2016 y en los de Tokio 2020 consiguió cuatro diplomas de finalista, unos resultados que se unen a las doce medallas en Mundiales y otras doce en Europeos. Ahora, este bronce en París le devuelve a un podio olímpico ocho años después y le permite cumplir con su objetivo, ya que llegó a la capital parisina con aspiraciones de estar en lo más alto.
María Delgado ha completado los 100 metros espalda con un tiempo de 1:11.33, a tres segundos del oro (que se llevó la brasileña María Carolina Gomes Santiago) y a dos de la plata, de la ucraniana Anna Stetsenko.
«Sueño con lo máximo. Con lo que realmente yo volvería satisfecha a España tras los Juegos es habiendo dado todo, mi máximo rendimiento, el mejor que pueda, y además disfrutando, que es lo que me voy a llevar. Sé que si doy lo mejor de mí ese día voy a poder estar muy arriba. Nadaré el 100 mariposa, el 100 espalda, el 100 libre y el 100 libre mixto», anunciaba antes de los Juegos en una entrevista publicada en Heraldo.
Íñigo Llopis, oro en 100 espalda S8
Además, el nadador guipuzcoano Íñigo Llopis ha dado este sábado la tercera medalla de oro a la delegación española presente en los Juegos Paralímpicos de París tras conquistar los 100 metros espalda S8, mientras que la aragonesa María Delgado ha sumado un bronce en los 100 metros espalda S12.
Llopis era el rival a batir en su final, a la que llegaba tras ser el más rápido en las series y como actual campeón del mundo. El vasco no ha dado opciones a sus rivales y se ha impuesto con autoridad para lograr su segunda medalla en unos Juegos tras la plata de hace tres años en Tokio en esta misma prueba.