Iglesias intenta rescatar la negociación con el PSOE con una oferta de coalición a la baja

Cerrada la vía de los equipos negociadores solo el cara a cara entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias puede rescatar la situación. Mientras el presidente en funciones se ha limitado a pedir el apoyo del resto para que le den la presidencia, el líder de Podemos ha vuelto a «tender la mano» a Sánchez para alcanzar un acuerdo.

Iglesias ha cerrado su intervención proponiendo una coalición que nazca de la oferta que el PSOE hizo en julio y a partir de la última propuesta realizada por Podemos. Es decir, Iglesias se abre a rebajar su última propuesta para alcanzar un acuerdo. «Le propongo que sobre la base de esas dos propuestas nos sentemos a negociar».

Ha pedido a Sánchez que acepte alguna forma de coalición aunque no sea su prioridad recordándole que Podemos ya ha cedido aceptando una coalición en la que él mismo había sido vetado y con una representación «muy lejos de la proporcionalidad» que resultó de las elecciones.

El líder de Podemos sigue reclamando una coalición, y ha reivindicado esa alianza para hacer frente a los desafíos europeos: «Para ello es necesario un Gobierno estable, un Gobierno con una base parlamentaria sólida».

Ante la inminencia de un Brexit sin acuerdo Iglesias ha justificado que «es muy difícil que un Gobierno en funciones o sin mayoría sólida pueda afrontar con fuerza o rigor necesario lo que pase con el Brexit».

Durante su intervención en la tribuna, Iglesias ha pedido a Sánchez que extraiga lecciones de Italia, donde el Partido Demócrata y el Movimiento 5 Estrellas, tradicionalmente rivales, han alcanzado un acuerdo para gobernar juntos. «Es preferible siempre coalición antes que una repetición electoral».

La segunda lección ha sido alertarle de que no haga una jugada similar a lo que intentó Matteo Salvini: «La gente no ve bien cuando alguien trata de adelantar elecciones», y ha advertido a Sánchez de que «se equivocará» si hace caso a los asesores que le dicen que por un escaño más merece la pena ir a elecciones.