La calma de Fernando Alonso entre la sobreexcitación de los pilotos ‘revoltosos’

Fernando Alonso confirmó las buenas sensaciones mostradas desde el viernes, y entró por tercera vez en el Q3 en 2021 con la novena posición, octava después de la sanción de tres posiciones a Lando Norris. El español se mostraba contento, pero con la sensación de haber podido extraer aún algo más del puesto logrado.

Las continuas interrupciones de las sesiones clasificatorias en los momentos decisivos, consecuencia de sucesivos accidentes, no era la mejor forma de extraer el potencial de cada coche. Fueron muchos al final los pilotos que, como Alonso, no pudieron realizar vueltas con neumático nuevo al verse detenida la sesión por la presencia de coches accidentados en mitad de la pista.

Aunque el asturiano reconociera que la situación podía afectar a todos, admitió sentirse animado y cómodo por el buen ritmo de su Alpine y optimista para sumar puntos por primera vez desde Portugal y después de dos difíciles carreras en Barcelona y Mónaco. «Creo que no sacamos todo el potencial del monoplaza porque cada vez que poníamos un nuevo juego de neumáticos, no lo llegábamos a usar. En todo caso, creo que tenemos un buen coche, hemos estado yendo bien todo el fin de semana, metiéndonos siempre en el top 10 cada sesión”.

La ventaja de los accidentados

El piloto español quiso mojarse sobre una cuestión cada vez más candente, la posibilidad de que los pilotos que provoquen el final anticipado de una sesión por un accidente pierdan luego su posición en parrilla. El piloto de Alpine denunciaba la ventaja injusta que permiten las reglas a quienes provocan los accidentes una ventaja injusta y que quizá, ante la posibilidad de perder su posición en parrilla, se pensarían dos veces ir tan al límite. Tras su experiencia en Indycar Alonso sabe de lo que habla, porque en ese campeonato los pilotos que provocan banderas rojas pueden perder posiciones en la parrilla.

La polémica ya venía caliente desde Mónaco, cuando Charles Leclerc no perdió la pole a pesar de destrozar su coche e impedir a sus rivales que completaran su mejor vuelta. Aquí en Bakú los accidentes de Giovinazzi, Ricciardo y Tsunoda dieron final anticipado a la Q1, Q2 y Q3 respectivamente, pero sin pérdida de posiciones para ninguno: “Si se introdujera una regla al estilo IndyCar – por la que los pilotos que causan banderas rojas se le acoplan sus dos tiempos más rápidos – entonces los pilotos tendrían más cuidado”, matizó el asturiano.

«Creo que es injusto – destacó con cierta molestia Fernando-, que las personas que se estrellaron, puedan reparar su coche y mantengan su posición para la carrera. No tiene sentido que todos los que no nos hemos chocado no podemos tocar el coche hasta la carrera y sin embargo sí pueden cambiar las piezas que necesiten aquellos que causaron las banderas rojas de final de la sesión. Sí, es verdad que esa norma a nosotros podría beneficiarnos otro día pero, en todo caso, creo que la gente necesita calmarse un poco y conducir al 98% en un circuito urbano y no al 120%, porque si te chocas y empiezas último en la carrera, tal vez no conduzcas por encima de tus posibilidades”. Aunque optimista para la carrera, el piloto español cree que si mañana continúa la tónica de accidentes del sábado, habrá mucha incertidumbre: “Mañana veremos a ver qué pasa, si la gente sigue conduciendo al 120% por encima de sus posibilidades habrá muchos coches de seguridad, y si la gente se calma un poco tendremos una carrera normal».

La sabiduría del profesor

En el buen sentido, se notaba a un Fernando maduro y veterano, que busca lo que esos profesores con alumnos revoltosos: simplemente, que las cosas discurran con normalidad. En todo caso, es bueno ver que se respira optimismo de nuevo en Alpine, y que tanto el equipo como Alonso creen que pueden tener una buena carrera. “Me han dicho que es la primera vez que entro en Q3 en Bakú, así que algo es algo,- admitió el piloto asturiano entre risas-. Aquí sí se puede adelantar, no es como en Mónaco. Aquí la recta larga te permite adelantar si tienes buen ritmo, así que veremos mañana que pasa, lo importante será cuidar bien los neumáticos”

Lando Norris perdió tres posiciones en parrilla por ignorar una bandera roja durante la Q1, por lo que partirá en novena plaza, permitiendo que Alonso arranque desde la octava posición en parrilla. De sus palabras con los neumáticos se deduce que irá a una estrategia de una sola parada, pero susceptible de ser modificada si la sobreexcitación de ciertos pilotos revoltosos continuara en la carrera.