El Gobierno prevé recaudar más por la subida al diésel que de las rentas más altas

El Gobierno prevé recaudar más dinero por la subida de los impuestos al consumo del diésel, que penaliza a la clase trabajadora, que al incremento de la presión fiscal a las rentas más altas. Así aflora, pese a la retórica gubernamental, en las propias cifras difundidas por el Ministerio de Hacienda.

En ellas, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero espera ingresar 670 millones por la llamada «fiscalidad verde» y un máximo de 667 millones por la subida a las rentas más altas tanto en IRPF como en Patrimonio. Por el incremento del IRPF prevé 328 millones más y por la subida del Impuesto de Patrimonio, 339 millones. Este último dato es, además, aún incierto porque dependerá de su aplicación en las Comunidades Autónomas.

Aún así, Montero ha reiterado que no hay subida fiscal «para la clase trabajadora». Su estimación sobre el endurecimiento de este impuesto indirecto hasta ahora es que sería una subida mínima de tres euros al mes al consumidor medio de diésel, pero en el sector automovilístico advierten de un incremento muy superior a trabajadores que utilizan con frecuencia su vehículo diésel sin contar la pérdida de valor.

Según los datos oficiales el Gobierno prevé elevar en 5.678 millones de euros la recaudación con las nuevas medidas tributarias acordadas con Unidos Podemos en el acuerdo presupuestario alcanzado con esta formación política. Incluyen seis incrementos o creaciones de impuestos. Así lo ha detallado la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros donde junto a la ministra de Economía, Nadia Calviño, ha presentado el cuadro macroeconómico y las líneas maestras del plan presupuestario que el Gobierno remitirá hoy mismo a Bruselas.

De esa cifra de mayor recaudación, 4.489 millones irán al presupuesto del Estado, y el resto a la Seguridad Social y las cuentas de las comunidades autonómas.

Las subidas del Impuesto de Sociedades (limitación de exenciones y la tributación mínima) serán las que aporten la mayor cuantía, en total, 1.776 millones de euros. En sentido contrario, se prevé que la rebaja del tipo para pymes detraerá 260 millones.

Le sigue el impuesto sobre Servicios Digitales, o Tasa Google, con el que prevé recaudar 1.200 millones de euros, el doble de lo que estimaba el anterior ministro, Cristóbal Montoro por la misma figura tributaria. El impuesto sobre las transacciones financieras aportará 850 millones de euros, mientras que el incremento del IRPF a las rentas muy altas generará la citada recaudación de 328 millones, mientras que la rebaja del IVA detraerá 53 millones de euros.

Asimismo, la ministra Montero ha señalado que las medidas de lucha contra el fraude fiscal (actualización de la lista de paraísos fiscales, limitar el pago en efectivo a 1.000 euros cuando una de las partes sea un profesional y rebaja a 600.000 euros del importe de la deuda para ser incluido en la lista de morosos, entre otras) permitirán ingresar en conjunto 828 millones de euros. La veracidad de estas cifras será ahora evaluada por la Comisión Europea.

De la distribución de ingresos y gastos recogidos en las cuentas, se deduce que los segundos superarán a los ingresos en 32.950 millones en 2018, una brecha que se reducirá a 22.223 millones el año próximo. Así, los gastos crecerán tanto este año como el próximo un 3,1%, mientras los ingresos lo harán un 5,7%, siempre según el Gobierno.

La mejora de la recaudación prevista y la contención del gasto permitirá que el techo de gasto se sitúe en 125.064 millones de euros, con un aumento del 4,4%, estima Montero.